Las desconocidas aficiones de Oscar Casas
El actor acaba de estrenar, junto a Blanca Suárez, ‘Jaguar’, la serie de Netflix en la que da vida a Castro
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Siguiendo los pasos de su hermano mayor, ha conseguido hacerse un hueco en nuestras pantallas. Tanto es así que, a sus veintitrés años, y desde muy niño ante las cámaras, tiene más de tres millones de seguidores y enlaza un proyecto tras otro. Ahora, Oscar Casas acaba de estrenar, junto a Blanca Suárez, Jaguar, donde da vida a Castro, “un tío con una máscara y contra máscara”. “Y eso es, precisamente, lo que más me ha movido. Por un lado, es un medio loco con ganas de venganza, con ganas de vida, de tener una familia y de demostrar todo el rato su valentía y masculinidad, y luego tenemos a esa persona sensible, insegura, con esos miedos…”. La serie de Bambú Producciones para Netflix, idea original de Ramón Campos y Gema R. Neira, que se ha colocado entre las más vistas de la plataforma en pocos días, narra cómo un grupo de sobrevivientes del nazismo intenta atrapar a Otto Bachmann, “el hombre más peligroso de Europa”, que ayudaba a los nazis a encontrar refugio tras la Segunda Guerra Mundial.
Hablamos con el actor de sus retos, sus ilusiones y sus aficiones, entre las que están los deportes, el surf y bailar. “Lo sabe poca gente, pero me encanta bailar, en general, de todo, baile urbano…”, reconocía hace un tiempo.
“Hago surf, juego al tenis y me encanta también bailar. Son los tres deportes que practico en mi día a día”
-¿Ha tenido que prepararte físicamente para el personaje?
-Físicamente no. Me gusta mucho el deporte y practico varios deportes en mi día a día, pero no hizo falta. Muchos ensayos para las escenas de acción con los especialistas, que son unos cracks, pero nada más allá del deporte que hago habitualmente.
-¿Ha sido un reto para ti?
-Creo que todos los personajes que he ido interpretando han sido retos, es lo que me gusta de ellos. Han sido personajes distintos que se escapan bastante de cómo soy yo como persona. Así que claro, ha sido un reto increíble, que es también lo que a mí me mueve y me hace disfrutar de la actuación.
-¿Y qué tal trabajar al lado de Blanca Suárez?
-La había visto en muchísimos proyectos que había hecho antes y siempre me había encantado, así que trabajar con ella ha sido increíble, la verdad. Ver cómo hace su arte es maravilloso.
-¿Algo que destacarías de ella?
-Muchas cosas. Su simpatía, la felicidad que da en el set, su delicadeza y su arte. Blanca tiene algo innato en ella, en su mirada, que es increíble. Es algo que tiene ella y que no se puede explicar, y es brutal verlo en primera persona.
“‘Hermano de’ voy a ser siempre, porque Mario es mi hermano! Nos queremos mucho, siempre me da muchos consejos, me ayuda... Él quiere lo mejor para mi y yo le estoy agradecido”
-Es la primera vez que trabajáis juntos pero os conocéis desde hace mucho. ¿Se ha notado esa confianza entre vosotros a la hora de trabajar?
-¡Hombre, claro! Era la única a quien conocía de los cuatro y, claro, al conocerla es más fácil. Al llegar el primer día ya conoces a alguien –ríe–. Esa confianza, pues claro, sentaba, pero rápido los cinco hicimos mucha piña y estábamos todos en la misma vibra.
-¿Te ha dado algún buen consejo que hayas hecho tuyo rápidamente?
-Nos ayudábamos mucho entre todos. Al fin y al cabo tenemos muchas escenas los cinco juntos y nos aportábamos muchísimo todo el rato, así que seguro que hay muchos. No te sabría decir exactamente cuál, pero es que en general los cinco nos hemos aportado mucho entre nosotros.
-Sabemos que a Blanca le gusta hacer bromas a los compañeros de rodaje, lo ha reconocido en más de una ocasión entre risas. ¿Habéis ‘sufrido’ el efecto Blanca también en Jaguar?
-Sí, la verdad que sí. No sé si bromas, a ver, bromas también, pero lo que he dicho antes. Tiene una alegría… da una energía de alegría y de estar muy cómoda en el set que te hace estar muy relajado y eso se agradece mucho.
“Sin duda, mi prioridad y el motor de mi vida es mi familia... Mis hermanos, mis padres. Estoy muy tranquilo con eso” –ríe–
-Has participado en muchas series, desde que eras un niño, y cada vez con más protagonismo en la historia, desde El barco, Águila Roja, Cuéntame como pasó, Siempre Bruja, Instinto... ¿Cómo afrontaste este nuevo proyecto desde un punto ya más maduro?
-Fue increíble. Cuando me llegaron los guiones y leí a Castro me encantó y me apasioné desde el primer momento, porque es lo que dices, creo que es el primer proyecto más maduro, un poco más adulto y me apetecía mucho cruzar ya esta línea, llegar más a la madurez, a un personaje más curtido. Ha sido super interesante y me lo he pasado bomba, la verdad. Y se sufre mucho también porque cuando hay personajes más maduros que tienen más historias, más vida y hay que llegar al fondo de esos sentimientos, se siente, se sufre y hay desgaste emocional, pero la verdad que muy bien.
-Empezaste como “hermano de” y te has hecho tu propio nombre en la profesión. ¿En qué momento sentiste que habías dado ese salto?
-A ver, hermano de Mario voy a ser siempre porque es mi hermano –ríe–. Aunque es cierto que José, en Instinto, fue un personaje muy bonito que tuve la suerte de interpretar, a la gente y al público les gustó mucho y creo que ese personaje fue un momento importante en mi carrera.
-No te importa que te relacionen con él… Aunque te preguntemos por Mario en cada entrevista…
-¡Pues es mi hermano, cómo no voy a querer que me relacionen con él! –ríe–. No me importa para nada que me preguntéis por él y no me va a importar nunca.
-¿Le pides consejos y los sigues siempre?
-Sí, claro. Para mí, Mario, al fin y al cabo, es uno de los mejores actores de España. Siempre me da muchos consejos, me ayuda mucho, pues lo que hace un buen hermano. Nos queremos mucho, él quiere lo mejor para mí y yo le estoy agradecido.
“Si hay algún que otro proyecto en Hollywood, no estaría mal –ríe–. Es una palabra muy grande, pero soñar no tiene límites”
-Se ve siempre que hay muy buena relación entre todos los hermanos. ¿Para ti la familia es lo más importante?
-Sin duda, mi prioridad y el motor de mi vida es mi familia, mis hermanos, mis padres. Estoy muy tranquilo con eso –ríe–.
-¿Si no hubieras sido actor, a qué te habrías dedicado?
-Pues no lo sé. Me gustaban mucho los animales, veterinario quizás. Pero siempre me ha encantado ser actor, desde que tenía cinco añitos.
-¿Cuáles son los deportes que practicas?
-El surf, el tenis y me encanta también, bailar. Son como los tres deportes que practico en mi día a día.
-¿Te ves en Hollywood?
-Hombre, si hay algún que otro proyecto chulo por ahí, no estaría mal –ríe–; Hollywood es muy grande, pero soñar no tiene límites.
-¿Qué nuevos proyectos tienes en cartera?
-Pues acabo de terminar una película, una comedia romántica de vampiros, Hollyblood, que es muy divertida, me lo he pasado muy bien con este proyecto y espero que a la gente le guste.
-¿Eres seriéfilo, sueles engancharte con facilidad a las series?
-Sí soy bastante seriéfilo, me encantan las series, me las he visto casi todas. La última, El Inocente, de mi hermano. Me he enganchado porque, la verdad, que es un serión y Oriol Paulo hace siempre estas típicas series que te enganchas y no puedes dejar de verlas; es muy buena y la he disfrutado mucho.
-¿Tienes una favorita de siempre?
-Sí, mi favorita es Breaking Bad, es mi serie idílica, me parece la mejor serie que se ha hecho nunca.
-Y de todas las series en las que has participado, ¿tienes una que sea especial para ti?
-Todas han sido muy especiales, pero Siempre Bruja de Netflix fue increíble. Fueron cuatro meses en Colombia, pasé uno de los mejores veranos de mi vida y además hacer de un pirata que va al presente, no sé, era todo muy loco y me lo pasé muy bien, la verdad.
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