A veces el talento se hereda y otras veces se emplea en otras ocupaciones. Es cierto que hay que pulirlo, cultivarlo y tener aptitudes para ello y las personas que os presentamos a continuación han heredado la capacidad, los gustos y la competitividad de sus padres. Y es que aquella frase típica de “Yo de mayor quiero ser como papá” se ha hecho realidad en todos y cada uno de ellos. La mayoría de las veces sus progenitores les han puesto el listón muy alto y en muchas ocasiones arrastran tanto lo bueno como lo malo que conllevan sus apellidos.
Pulse sobre la imagen para ver la galería de fotografías
Empezaremos por Carlos Sainz Jr, quien acaba de debutar como piloto de Fórmula 1 dentro de la escudería Toro Rosso. Lleva en los genes la velocidad y por sus venas seguro que corre gasolina igual que por las de Mick Schumacher que está dispuesto a lograr que su padre, que se recupera todavía del grave accidente de esquí que sufrió en diciembre de 2013, se sienta orgulloso. A sus 15 años es subcampeón del mundo y de Europa de karts y ha firmado con el equipo de Van Amersfoort Racing en la Fórmula 4, que forma a jóvenes talentos para acabar compitiendo en la Fórmula 1.
Lo de Brooklyn Beckham es el fútbol, un campo en el que su progenitor es toda una estrella, aunque además ha hecho sus pinitos como modelo, lo que también ha probado su padre. Caminos paralelos. El mismo que sigue Javier que va tras las huellas de su padre, el desaparecido Severiano Ballesteros, con un palo de golf en un campo profesional. No sólo en el deporte, sino en el cine, un campo bien distinto, hay algunas muestras de esta "transferencia de talento". Citemos por ejemplo a Daniel, hijo de Imanol Arias, Jaden, hijo de Will Smith, y Connor, hijo de Tom Cruise. ¿Quiere conocerlos? Pulse sobre la imagen para ver la galería de fotografías
)
)
)
)
)
)
)
)
)
