El curso escolar acaba de comenzar y, lo más seguro, es que muchas de las actividades que nuestros hijos tengan que realizar para clase, así como deberes y asignaturas, sean impartidas o registradas de manera online. Una forma de dar clase que aumentó durante la pandemia y que llegó para quedarse. Y los padres, que queremos prepararnos lo mejor posible para esta vuelta al colegio, pensamos en cuál es la mejor forma de ofrecerle a nuestros hijos ese dispositivo electrónico que necesitan, pero que tanto miedo nos da dejárselo.

Así, la puesta a punto no solo incluye la compra de material escolar, de libros y cuadernos, sino también ofrecerles a nuestros hijos un medio de trabajo seguro y privado. Aquí entra de lleno lo que conocemos como ciberseguridad. Si es importante el control parental en la televisión, ¿no lo será también en el ordenador o tablet? A veces, no pensamos en ello y omitimos unas reglas básicas que puede derivar en ser víctimas de phishing, ransomware o cualquier tipo de estafa. Por eso, hemos querido hablar con los expertos de ESET, compañía experta en seguridad, para que nos den una serie de consejos a tener en cuenta antes de que nuestros hijos comiencen sus clases digitales.

Qué peligros existen por el uso de dispositivos electrónicos en clase

La pandemia, como hemos dicho, ha supuesto una digitalización acelerada de las clases y de las materias que se imparten en los colegios. Un fenómeno que parecía transitorio, pero del que podemos decir es ‘la nueva normalidad digital’, con el uso de este tipo de dispositivos en clase y para hacer los deberes, tanto en niños como de adolescentes. Por tanto, nuestros hijos están bajo una hiperconectividad permanente, con un gran consumo del mundo digital, que tiene su lado positivo, pero también su lado negativo, sobre todo, si abusan de él y comparten información personal en línea.

De entre todos los peligros, hay ciertas amenazas que son más comunes entre los más pequeños que, por su inocencia, son más vulnerables:

• Ciberbullying: acoso o intimidación dentro de un medio digital, sin importar la plataforma, de manera repetitiva y buscando atemorizar o humillar a otras personas.
• Grooming: acoso sexual intencionado a un niño, niña o adolescente a través de un medio digital que permita la interacción entre ambos, por lo que puede ser una cuenta en una red social o, incluso, un mensaje de texto o juego en línea.
• Sexting: grabación de contenidos sexuales a través de una webcam y difusión de lo grabado a través de correos electrónicos, redes sociales o cualquier otro canal que lo permita.
• Suplantación de identidad.
• Extorsión.

Además, el exceso de uso de pantallas sería otro de los grandes peligros a los que están expuestos con repercusiones tanto en su salud emocional, como en la física.

Consejos para un inicio de curso con seguridad

Existen muchas y variadas amenazas a las que habría que prestar atención durante todo el curso, pero también es cierto que no podemos estar observando a nuestros hijos cada vez que se conectan a Internet. Entre las más comunes, están las que vienen escondidas en forma de becas o soporte técnico. Aprender a identificarlas es fundamental, pero también dotar a tu dispositivo de todo lo necesario para alertar sobre ello. Por eso, los consejos que nos dan son los siguientes:

• No hacer clic en enlaces desconocidos ni abrir correos electrónicos de los que no conozcamos el remitente, nos prometan resultados o pidan clicar en enlaces.
• Cuidado con los correos que tienen una mala gramática o utilizan frases genéricas, suelen contener estafas.
• Evitar en todo momento compartir información personal.
• Mantener el sistema operativo con el que se trabaje lo más actualizado posible.
• No utilizar nunca dispositivos electrónicos portátiles desconocidos, o introducir memorias USB que no son tuyas en tu ordenador. Por supuesto, evitar el uso de teléfonos móviles inteligentes de otras personas.
• Utilizar una contraseña segura.
• No dejar nunca tu dispositivo sin bloquear en clase o sin vigilancia en el colegio.
• Hacer copias de seguridad de tus datos en un dispositivo aparte con regularidad.

Además, como padres, podéis solicitar al centro escolar (o pedirle a tu hijo que lo haga en el instituto o universidad) cuál es la política de privacidad y seguridad que utilizan en las clases en las que los alumnos trabajan con dispositivos electrónicos o se conectan a Internet. Por último, si puedes, invierte en un control parental eficaz. La educación en el mundo digital es la mejor herramienta y la más poderosa de evitar un susto en el mundo online, proteger su privacidad y seguridad.