Laia Aguilar es matrona, consultora certificada de lactancia materna IBCLC y coodinadora clínica en LactApp, un servicio gratuito de consultas sobre lactancia para mujeres (www.lactapp.es).

Junto a ella vamos a descubrir qué sucede cuando la madre lactante toma alcohol, cannabis u opiáceos. ¿Hay que descartar la leche? ¿Cómo afecta al bebé? ¿Qué tiempo de espera para la toma es el adecuado?

Alcohol y lactancia materna: así influye

Como apunta la experta, el alcohol que toma la madre está presente en la leche en la misma cantidad que en su sangre. Y la concentración en ambas depende de tres factores:

• La cantidad de alcohol ingerida.
• El peso de la madre.
• Si se ha consumido con comida o se ha tomado solo o en ayunas.

Hay que tener en cuenta que el bebé nace con un hígado muy inmaduro, por lo que no es capaz de metabolizar ese alcohol, ”por este motivo, pequeñas cantidades del mismo pueden ser perjudiciales para él”. Los efectos sobre el niño dependerán entonces de la cantidad de alcohol tomado, de la edad del pequeño y de si se trata de un consumo esporádico o de un consumo habitual.

Lo que sí hay que saber es que el alcohol no solo influye sobre el bebé sino que inhibe la producción de oxitocina, una hormona necesaria para que la leche salga del pecho, por lo que que “la toma de alcohol puede dificultar la lactancia si se hace de forma habitual”.

En cuánto tiempo el alcohol desaparece de la sangre materna

Dependiendo de los tres factores anteriores, el tiempo en que el alcohol ya no está presente en sangre y, por lo tanto, deja de estar en la leche materna varía. Así lo ejemplifica Laia Aguilar: “Para una mujer de unos 70 kilos, una copa de alcohol se considera que necesitaría 2 horas y 12 minutos para que ya no estuviera en sangre; dos copas, 4 horas y 24 minutos. En una mujer de unos 55 kilos necesitaría 2 horas y media para una copa y 5 horas para dos”.

Estos tiempos están calculados para mujeres que amamantan de forma exclusiva a bebés muy pequeños. “Esto puede cambiar si la lactancia no es exclusiva y, sobre todo, si el bebé ya está tomando otros alimentos y la cantidad de leche tomada es menor”, aclara.

“No es necesario desechar la leche, a no ser que la madre esté incómoda. El alcohol en la leche va a reducirse a medida que se reduce el alcohol en sangre”, explica la especialista.

¿Qué pasa con la cerveza 0,0%?

La cerveza 0,0% puede contener hasta un 0,04% de alcohol. “Es una cantidad muy pequeña y en la lactancia se consideraría segura”, comenta Laia Aguilar. Para que hubiera una concentración significativa de alcohol en sangre el consumo de cerveza 0,0% debería ser muy alto.

No obstante, hay que tener algo claro en relación al mito de que tomar cerveza es ‘bueno para la lactancia: “Sabemos que no tiene sustentación científica. Si te apetece tomar cerveza, la 0,0% puede ser una opción segura, pero no lo hagas para mejorar tu lactancia”, apunta.

©AdobeStock

¿Qué efectos tiene el cannabis sobre el bebé lactante?

Las sustancias psicoactivas del cannabis se encuentran en la leche materna en una concentración hasta ocho veces más alta que en sangre. “Por su composición, van a estar presentes en la leche entre 17 horas y 6 semanas. Además se acumulan en los tejidos grasos, como puede ser el cerebro del bebé”, advierte. “Se han podido observar sus efectos negativos en el desarrollo cerebral y neuroconductual de bebés a corto y largo plazo”.

El consumo de cannabis también afecta a la composición de la leche, que puede cambiar, y a la producción láctea, que puede disminuir. “Por todas estas consideraciones, se considera contraindicado el uso del cannabis, tanto de forma recreativa como de forma medicinal durante la lactancia”, indica la consultora de LactApp (@lactapp_lactancia, en Instagram).

Si una madre lo toma, dependiendo de la edad del bebé y de la cantidad tomada, se recomendaría “abstenerse de alimentar con su leche a su bebé mientras éste esté presente en leche, con lo que pueden pasar varios días. Durante este tiempo se tendrá que extraer la leche con un sacaleches y desecharla para mantener su producción y disminuir el riesgo de mastitis”.

Lactancia y opiáceos: qué hay que saber

Los opioides tienen distintos efectos, dependiendo de cuál se use. “En general, parece que el efecto adverso más importante es la sedación de la madre y del bebé. Dependerá de la edad del bebé la repercusión que esta sedación pueda tener en su salud”, comenta Laia Aguilar. En la página web de referencia www. e-lactancia.org se puede consultar la compatibilidad de cada uno de ellos con la lactancia.

“Con referencia a los opioides usados de forma recreativa, nos encontramos con la misma situación que con los prescritos. La sedación materna y también del bebé puede ser un problema, además de la falta de control que muchas veces se tiene de la composición real de estas sustancias”, alerta.