Durante todo el día nuestros pies permanecen encerrados dentro del calzado. Esto hace que se contraigan, acomodándose al espacio que le delimitamos. Como ocurriría con una raíz, el pie busca primero asentarse sobre la zona que ocupa, y eso se traduce en una contracción muy negativa para nuestros músculos y tendones, adhiriéndose con más fuerza sobre los huesos, perdiendo inervación sanguínea y nerviosa.
Además, puede que pasemos mucho tiempo de pie al día y, si no, son los pies los que desplazan al resto del cuerpo. En cualquier caso, sobre ellos pesa todo lo que somos. Podrían verse como nuestras raíces, lo que nos une al suelo y, sin embargo, no es común tenerlos en cuenta cuando hablamos de nuestro bienestar y equilibrio físico. El ejercicio no se ha detenido en los pies con el suficiente cariño, pero Yamuna Zake, creadora del Foot Fitness, cambió esto.
El Foot Fitness no es un complemento a otras disciplinas, es en sí mismo un trabajo dedicado y concreto, centrado en el bienestar del pie, en su entrenamiento y recuperación, y no está enfocado de forma específica a deportistas, sino a cualquier persona. El enfoque del Foot Fitness es que si ganamos salud para los pies, fortaleciéndolos, tonificándolos, mejorando su postura y circulación, esas mejoras redundarán en el resto del cuerpo, concretamente en las piernas, caderas y espalda, que mejorarán su postura.
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El 'foot fitness' nación en el yoga
Yamuna Zake comenzó a practicar yoga a los 14 años. A los 33 se quedó embarazada de su hija, y los médicos le dijeron que si pesaba más de 3 kilos, deberían practicarle una cesárea. Pero Zake se negó, porque pretendía dar a luz en casa con una comadrona.
Finalmente el bebé pesó 4 kilos y, firme en su determinación, su hija Yael nació en casa sin cesárea, lo que le provocó a Zake varias rupturas de abductores en la pierna izquierda, dañando el fémur. La lesión duró mucho tiempo, lo que le produjo caminar con un crujido continuo de su articulación, que se le desencajaba, produciéndole un profundo dolor. Sin embargo los médicos no le pudieron dar una solución dado que el problema era postural.
Fue entonces cuando Zake decidió tomar cartas en el asunto, utilizar todo lo que sabía de yoga y aplicarlo a modificar su postura para sanar. Fue así cuando trabajó en un nuevo entrenamiento. Y en dos semanas el fémur se encajó.
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El secreto está en la postura
El método desarrollado por Yamuna Zake utiliza unas pelotas, que son realmente semicircunferencias apoyadas en el suelo, sobre la que deben posarse los pies para realizar los ejercicios. Estas pelotas generan un masaje que a su vez es también una repetida compresión contra los músculos del pie. El peso de todo el cuerpo cae sobre esta postura y ejercita toda su anatomía. Se trabajan de esta forma los músculos, pero con todo detalle.
Los resultados se notan desde las primeras sesiones, entre otras cosas porque es una zona del cuerpo que probablemente nunca ha recibido ningún cuidado, por tanto los primeros ejercicios producen que el pie despierte a marchas forzadas y se sensibilice a gran velocidad.
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