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Fácil
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¡HOLA! COCINA
Estas alcachofas fritas bien crujientes son deliciosas. Un bocado crujiente y lleno de sabor para disfrutar de las alcachofas cuando están en temporada. Si son de buena calidad, no necesitarás nada más, ninguna salsa ni aderezo que enmascare su sabor. El secreto: dejar las hojas bien tostaditas.
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1.
Para hacer estas alcachofas fritas bien crujientes lo primero que debemos hacer es pelar las alcachofas. Retiramos las primeras hojas hasta arrancar tres o cuatro capas. Cortamos el extremo del tallo, dejando unos cuatro centímetros más o menos. Cortamos la puntita de las hojas y, por último, pelamos el tallo y un poco la base con cuidado de no quitar mucha carne.
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2.
Una vez limpias, las partimos en mitades.
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3.
Acerca una sartén al fuego con abundante aceite.
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4.
Cuando el aceite esté bien caliente incorporamos las mitades de alcachofa en pequeñas tandas, para que no baje la temperatura del aceite.
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5.
Freímos bien por todos los lados hasta que la alcachofa esté bien tostadita, solo cuando las hojas estén muy muy tostadas, quedarán crujientes y el corazón tierno.
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6.
Vamos sacando las hojas a un papel absorbente para retirar el exceso de grasa.
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1.
Servimos las alcachofas inmediatamente, bien caliente, con unas escamas de sal por encima y un golpe de pimenta negra recién molida.
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