Esta receta solo con patatas es una de las más populares del recetario clásico español. Era una manera de convertir un ingrediente barato y considerado 'pobre' en algo más aparente, 'dándole importancia' con un rebozo y una salsa. Hoy se ha convertido en una receta versionada de distintas formas y enriquecida con otros elementos como las alcachofas, las cigalas, etc.
- 600 g de Patata
- 1 latas de Alcachofas al natural
- 1 ud de Cebolla
- 1 dientes de Dientes de ajo
- 1 ud de Huevos
- 50 g de Harina
- 1 cs de Perejil fresco picado
- Azafrán unas hebras
- 150 ml de Aceite de oliva
- 6 rama de Perifollo para decorar
- Sal
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1.
Pela las patatas, lava y corta en rodajas de 5 mm.
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2.
Sazona con sal, pásalas por harina y huevo batido y fríelas en una sartén con el aceite bien caliente hasta que se doren.
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3.
Escúrrelas sobre papel absorbente y colócalas en una fuente refractaria.
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4.
Precalienta el horno a 180ºC. Pela el ajo y machácalo en un mortero con el azafrán.
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5.
Pela la cebolla, pica y rehoga en una sartén con 3 cucharadas del aceite de freír las patatas -colado previamente-.
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6.
Añade 1 cucharada de harina, remueve con una cuchara de madera e incorpora el contenido del mortero y 100 ml de agua.
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7.
Cocina 1 minuto mezclando todo bien y vierte en la fuente refractaria sobre las patatas.
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8.
Mete al horno a 180ºC durante unos 15 minutos.
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9.
Escurre las alcachofas.
-
1.
Reparte las patatas en platos hondos con un poco de su caldo, acompaña con las alcachofas colocándolas encima, espolvorea con el perejil picadito y decora con el perifollo.
-
1.
Calienta las alcachofas al baño María en la misma lata una vez abierta antes de colocarlas bien escurridas sobre las patatas.
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