BRINDA CON VINOS DE RONDA POR EL MES DE OCTUBRE
Porque cualquier excusa es buena para escaparse a la Ciudad Soñada, ¿no crees? Así que, en esta ocasión, que sea para bebértela. Te proponemos que comiences tu escapada recorriendo su comercial calle La Bola, que te asomes al Tajo en su Puente Nuevo y guardes en tu retina la panorámica que contemplarás desde las alturas. Que te pierdas por los Jardines del Moro, visites la iglesia Mayor y los Baños Árabes, y que entonces, una vez tengas radiografiada la ciudad, te entregues sin miramientos al fascinante mundo del vino, ya introducido en la zona por los fenicios siglos atrás.
Ronda, la ciudad soñada... y la de las bodegas
¿Y cómo hacerlo? Visitando algunas de las 26 bodegas repartidas por el término municipal. No te podrá faltar Descalzos Viejos, ubicada en un antiguo convento trinitario, ni tampoco Schatz, cuyo propietario viajó desde Alemania con 18 años para dedicarse a este oficio. Añade a la lista La Melonera, que logró recuperar una variante de uva autóctona durante años perdida, Doña Felisa o el Cortijo Los Aguilares. Caerás rendido –aún más– ante la ciudad.