Médico explorando a un niño con dolor de rodilla©AdobeStock

Salud

¿Qué enfermedad puede estar detrás del dolor de rodillas en niños y cómo se trata?

El dolor muscular durante el crecimiento puede ser relativamente frecuente. En el caso de las rodillas, hay una enfermedad asociada a él. ¿Cómo se manifiesta?

Además de los golpes o caídas que se pueden producir en el día a día por la actividad normal de juegos y movimiento que conlleva la infancia, hay una serie de dolores óseos, musculares o articulares que pueden aparecer en esta etapa por otras razones. Es el caso de los dolores en las rodillas producidos por la enfermedad de Osgood-Schlatter.

Para saber más sobre ella y cómo le afecta al niño hemos hablado con el Dr. Francisco José Lara Pulido, traumatólogo deportivo, responsable de Arthrosport y del Área Quirúrgica de la Mutualidad de Futbolistas en Sevilla y Huelva.

¿Cómo se manifiesta la enfermedad de Osgood-Schlatter en los niños?

La enfermedad de Osgood-Schlatter se presenta “después de realizar ejercicio o incluso durante el mismo con un dolor debajo de la rodilla, sobre todo si el ejercicio incluye saltos, carreras, cambios de ritmo y dirección...”, explica el especialista. Puede afectar a una rodilla o a ambas y es, típicamente, una lesión por sobrecarga. “Eso significa que ocurre cuando una persona hace los mismos movimientos una y otra vez”, indica.

Se produce porque el tendón rotuliano, que es el que conecta la tibia a la rótula, tira del cartílago de crecimiento ubicado en la parte superior de la tibia. “Las actividades y los deportes hacen que esto ocurra una y otra vez, lo que provoca esta irritación en el cartílago de crecimiento y que denominamos en términos médicos apofisitis”, comenta el Dr. Lara. Es esta lesión la que provoca el dolor en la rodilla que caracteriza a la enfermedad de Osgood-Schlatter.

¿En qué edad suele aparecer la enfermedad de Osgood-Schlatter?

Esta dolencia es típica del crecimiento. Se da en niños y adolescentes que están en lo que coloquialmente denominamos ‘el estirón’, que suele producirse entre los 9 y los 14 años. Son niños que “por norma general practican de manera activa deportes o actividades que requieren correr o saltar de forma repetitiva”, aclara el traumatólogo.

Este tipo de dolores pueden alertar mucho a los padres. Pero hay que saber que si se produce en época de crecimiento, están muy ligados a la intensidad del ejercicio y aparecen sin un traumatismo previo, puede tratarse de la enfermedad de Osgood-Schlatter, especialmente si se presenta a la vez en ambas rodillas.

En todo caso, es el médico el que debe valorar siempre el cuadro y, sobre todo, por si pudiera tratarse de otra patología más grave, cuando estemos ante “un dolor invalidante que provoque impotencia funcional manifiesta, que implique cojera o dolor que no se controle con las medidas habituales que dominamos en el día a día”, recomienda.

Adolescente en consulta médica con dolor de rodillas©AdobeStock

¿Cuál es el tratamiento para la enfermedad de Osgood-Schlatter?

La primera medida que hay que tomar inicialmente cuando se presenta la enfermedad es controlar las cargas, esto quiere decir “controlar la actividad que detectamos que puede provocar este proceso”, subraya el Dr. Lara. ¿Qué implica esto? “Una reducción de todo aquel gesto que creamos que pueda estar provocando la dolencia”. Pero no significa que el niño tenga que abandonar el deporte, “aunque sí dosificarlo en la mayor medida posible”, advierte.

En cuanto al abordaje terapéutico, hay que apoyarse en tratamientos de fisioterapia “con todas aquellas herramientas que ayuden a optimizar el proceso, así como en profesionales que controlen esa vuelta al deporte con dosificación de cargas”, insiste.

Dependiendo de la intensidad del dolor que tenga el niño y del momento de evolución de la patología, será necesario pautar periodos de más o menos reposo, “uso de analgesia ocasional o incluso frío en las fases inflamatorias y de agudización que, posteriormente, se podrá alternar con calor dependiendo de la fase en la que nos encontremos”, expone el especialista de Arthrosport.

¿Puede quedar alguna secuela en el niño afectado?

Por norma general, la enfermedad de Osgood-Schlatter se resuelve bien. Eso sí, algunos adolescentes pueden quedarse con un bulto debajo de la rodilla afectada que no va a desaparecer. Es un bulto indoloro “que no plantea mayor problema que molestias al arrodillarse”, tranquiliza el experto.

También algunos de los afectados (en un porcentaje bajo) pueden quedarse con un dolor crónico en las rodillas que requiera de estudio por parte del especialista en la edad adulta. Y “en raras ocasiones se producen fracturas o arrancamientos asociados al proceso que requerirán cirugía”, puntualiza.

Lo importante es acudir a los especialistas que puedan determinar la causa y pautar el tratamiento indicado para resolver el cuadro en el niño o el adolescente.


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