El pasado mes de enero, los duques de Sussex llegaban a un acuerdo histórico con la Reina para abandonar la primera línea de la familia real. En primavera, finalizado el periodo de transición que se habían dado, el príncipe Harry y Meghan Markle comenzaban oficialmente junto a su hijo Archie su nueva vida al otro lado del Atlántico fuera del paraguas de Buckingham. No obstante, los términos consensuados con Isabel II son revisables al cabo de un año, por lo que la pareja, según informa el Daily Mail, ya estaría pensando en asegurar ciertos puntos fundamentales para ellos y su actividad y el acuerdo podría volver a cerrarse en Reino Unido.
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La principal preocupación de los Duques es mantener sus patronazgos reales para continuar con su colaboración con las organizaciones y asociaciones benéficas a las que siempre han estado vinculados, por lo que su objetivo es hacer permanente este punto del acuerdo. Es de las pocas concesiones que hizo la Reina tras aceptar que abandonasen sus obligaciones como miembros senior de la realeza, una decisión por la que el hijo menor de Carlos de Inglaterra perdió sus títulos militares y dejaron de ser tratados como 'Su Alteza Real', entre otras cosas. En esta revisión anual del pacto, no solo se repasarán los consensos a los que llegaron hace un año, sino que también se analizará los nuevos proyectos de Harry y Meghan para garantizar que no existan, por ejemplo, incompatibilidades. Desde que se independizaran financieramente de los Windsor, la pareja ha firmado contratos con grandes compañías como Netflix o Spotify. En sta renegociación también tendría cabida una hipotética marcha atrás por parte de la pareja en caso de quisieran retomar su vida como royals, algo muy improbable.
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Estas conversaciones, según apunta el diario británico, comenzarán de manera telemática a través de videollamadas entre el duque de Sussex, y tal vez su esposa, y los miembros 'senior' de la familia real, es decir, la Monarca y los príncipes Carlos y Guillermo. Se espera que sean mucho menos ásperas que las que tuvieron lugar en la cumbre de Sandringham donde se rubricó el acuerdo. El biógrafo real Andrew Morton ha expliado al Daily Mail, que Harry mantiene contacto con su abuela habitualmente, pero sabe que es mejor hablar las cosas cara a cara, por eso su intención en cerrar cualquier pacto en persona. No obstante, su regreso a Londres dependerá de la situación sanitaria. Además de atar estos cabos sueltos, el experto asegura que el duque de Sussex querría estar presente en su país para el cumpleaños de Isabel II, el 21 de abril, y el de Felipe de Edimburgo, que cumplirá 100 años el próximo 10 de junio.
Los duques de Sussex se encuentran disfrutando de la Navidad en familia en California, donde se han establecido en su nuevo hogar de Santa Barbara. Desde allí, han enviado este año un original christmas en el que podemos ver a toda la familia, Harry, Meghan y el pequeño Archie, en una ilustración realizada a partir de una fotografía que fue tomada por Doria Ragland, madre de la duquesa de Sussex a principios de este mes. El escenario elegido no es otro que el jardín de la casa familiar, donde viven junto a sus mascotas, un beagle llamado Guy y una labrador negro, que también aparecen en la instantánea.
Archie protagoniza su primera acción solidaria
Esta felicitación la daba a conocer la organización benéfica Mayhew, encargada del bienestar animal y que trabaja para mejorar la vida de perros y gatos, así como de sus dueños, con la que los duques de Sussex colaboran habitualmente. Ambos quieren hacer de su compromiso con las causas sociales la piedra angular de su actividad, y hasta Archie ha protagonizado ya una importante acción solidaria. Tal y como informa el New Zeland Herald, Harry y Meghan compraron hasta 100 gorritos de lana a nombre de su hijo a la empresa local neozelandesa Make Give Live. Según la fundadora de la compañía, que se define como social y sostenible. el pedido llegó acompañado de una carta de los Duques.
Lo que los Duques tienen que demostrar a la reina Isabel II en un año
