Si tienes instalada una de esas aplicaciones que te resume el tiempo que estás conectado en tu móvil, sin duda, el resultado es llamativo. Desde que los smartphones desembarcaron en nuestra vida, formando parte de nuestra rutina, es un hecho que les dedicamos más tiempo del que nos pensamos. Tanto es así que según un estudio realizado por Sondea, los españoles pasan una media de 11 horas diarias delante de una pantalla -y es que hay que tener en cuenta también las horas frente al ordenador en muchos puestos de trabajo-. Un uso que, además, no hace sino crecer, debido a que, por la pandemia de la COVID-19 pasamos aún más tiempo en casa. Todo ello hace que, de la mano de este uso de las nuevas tecnologías, aparezcan nuevas dolencias y trastornos físicos (más allá de los problemas psicológicos, como dependencia, estrés...).
Problemas que, sin duda, no tenían nuestros abuelos ni las generaciones anteriores a la nuestra, pero que los que vivimos hiperconectados ya estamos empezando a padecer. Según María Guerrero, psicóloga familiar experta de Qustodio, plataforma de seguridad y bienestar digital para familias, “para poder evitar estas ciber-patologías se deben poner en práctica medidas preventivas como limitar el tiempo de uso o establecer lugares en casa libres de pantallas, así como que los padres prediquen con el ejemplo guardando los teléfonos al menos 30 minutos antes de acostarse, saliendo al aire libre y manteniendo el volumen bajo”. Todo con el objetivo de evitar estos problemas que no existían hace tan solo unos años y que los resumen en siete.
‘Whatsappitis’ o ‘cibertendinitis’
No hay duda de que es, ya, una consulta que se repite cuando vamos al médico. También se la conoce como ‘artrosis de costurera’ y se origina debido a la forma de teclear en estos dispositivos, que hace que el dedo pulgar se convierta en el dominante. La consecuencia es una tenosinovitis, que es una afección dolorosa que afecta los tendones de la muñeca del lado del pulgar, afección que hasta la fecha solo era frecuente en los jugadores de golf o de deportes de raqueta, pero hoy en día está aumentando de forma considerable en niños y adultos.
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