Ejercicio

Aprovecha más y mejor tu esfuerzo físico eligiendo las mejores horas

Hacer deporte repercute de manera evidente en nuestro bienestar físico y mental. Pero no es lo mismo entrenar por la mañana, que al mediodía, que por la tarde. Según sean tus objetivos y tus ritmos de vida, podrás elegir la mejor hora para hacer ejercicio físico.

Por Cristina Soria

Realizar ejercicio físico con regularidad es uno de los mejores hábitos que podemos adquirir, no solo para sentirnos bien física y estéticamente, sino también para nuestro bienestar mental. Pero no a todos nos sienta bien hacer deporte a la misma hora, ni se consiguen los mismo objetivos entrenando por la mañana que por la tarde.

Seguro que no tienes las mismas ganas de entrenar a lo largo de todo el día. Esto se debe, entre otras cosas, a los ritmos circadianos, que varían en cada persona según su genética o sus hábitos de vida. Estos ritmos influyen en nuestros periodos de sueño y vigilia, en el comportamiento alimentario, la secreción hormonal o en la temperatura corporal. Según sea tu ritmo circadiano, te sentará mejor entrenar a una hora o a otra del día.

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También nuestros hábitos de vida influyen a la hora de hacer ejercicio. Los horarios de trabajo, principalmente, y otras obligaciones personales a veces determinan de forma clara el resto de rutinas que realizamos a lo largo del día. Cuando se trata de buscar un espacio para hacer deporte, hay que tener en cuenta que entrenar por la mañana nos activa física y mentalmente para el resto de la jornada, pero que también puede hacer que sintamos algo de más de cansancio a media tarde.

El mediodía es un momento muy bueno, siempre que aguantes hacer deporte antes de comer. Si es así, te ayudará a afrontar el resto de la jornada con energía y buen ánimo. La noche, en cambio, no es el mejor momento para hacer ejercicio, porque este aumenta nuestra adrenalina y ritmo cardíaco, lo que supone un problema a la hora de conciliar el sueño. Ahora bien, independientemente de todo esto, seguramente sean tu ritmo de trabajo y tus hábitos los que determinen a qué hora puedes entrenar.

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Puedes elegir la hora de entrenar según tus objetivos

Si podemos elegir a qué hora entrenar, ya que no nos influyen ni los hábitos de vida ni los ritmos circadianos, debemos entonces fijarnos en el objetivo que queremos conseguir. Este puede ser aumentar la fuerza, la resistencia aeróbica, perder grasa… Según diferentes estudios, la hora de entrenar va a influir de manera visible, y si tenemos tiempo disponible y podemos elegir, no está de más saber cuál es el mejor momento para hacerlo.

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Cuando buscamos aumentar nuestra resistencia aeróbica, es decir, ser capaces de mantener un esfuerzo a una intensidad media durante el mayor tiempo posible, no importa a qué hora del día entrenemos. En cambio, si lo que queremos es aumentar la resistencia anaeróbica, es decir, el esfuerzo de corta duración y de alta intensidad, el mejor momento es la tarde porque alcanzamos una temperatura corporal idónea para este fin.

Otra cosa muy diferente es querer aumentar la masa muscular. Para conseguirlo con mayor efectividad hay estudios que aseguran que primera hora del día y la última de la noche son perfectas para alcanzar nuestro objetivo. Pero si queremos deshacernos de la grasa que nos sobra, es durante la tarde cuando nuestro metabolismo disminuye y, con el ejercicio, conseguimos acelerar el metabolismo nuevo y, de este modo, quemar más calorías.

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