IDEAS PRÁCTICAS

Decálogo para sacar partido al espacio

Trucos (casi) mágicos que hacen crecer los metros de tus estancias, a través de la decoración y los elementos arquitectónicos.

Por hola.com

Actualmente, vivimos ‘esclavizados’ por el yugo de las casas grandes, sin darnos cuenta que muchas veces el tamaño no importa a la hora de crear una vivienda fluida, espaciosa y cómoda para vivir. La clave no está tanto es los metros cuadrados, como en la capacidad para optimizar los espacios y sacar lo mejor de ellos. Estas ideas –algunas verdaderos clásicos– constituyen una buena manera de hacer crecer –visualmente y físicamente– los metros de tus estancias, a través de la decoración y los elementos arquitectónicos. Ponlas en práctica, como si tuvieras una varita de mago y sorpréndete cuando veas el poder de un buen truco.

1. Di adiós a tabiques y puertas. Vivan los espacios abiertos, sin recovecos, que logran la comunicación fluida entre distintas estancias, permitiendo, a su vez, que la luz pase de una a otra. Si no eres ‘fan’ del estilo ‘loft’, apuesta por puertas correderas para separar tus habitaciones, ya que con ellas ganas hasta un metro y medio cuadrado extra.

Lee: Así se rehabilitó un pequeño apartamento del barrio Gótico de Barcelona

VER GALERÍA

Cuestión de distribución

2. Opta por una distribución fluida y a medida, que saque partido a los techos altos, las buhardillas, los huecos o las columnas. En los dormitorios pequeños, di sí a la distribución perimetral y deja el espacio central libre. Recuerda también el poder de la verticalidad y las posibilidades que te brindan las paredes. Puedes usarlas, por ejemplo, para colgar cosas que estorban, desde una bicicleta hasta el aspirador; o para colocar el televisor de 65 pulgadas.

Lee: Trucos para ampliar visualmente el espacio de tu casa

3. Si no puedes vencer al enemigo, alíate con él. Las zonas de paso siempre son espacios desaprovechados, que apenas tienen uso, aunque restan metros útiles a la casa. Puedes aprovechar para poner una zona de despacho, crear una pequeña biblioteca en el pasillo o un rincón de lectura en el hall de entrada.

4. Busca la luz, tanto la natural como la artificial. Es un requisito imprescindible para ver crecer tus estancias.

VER GALERÍA

Cuestión de sensaciones

5. Apuesta por los espacios ‘limpios’, donde no sobra nada, pero tampoco falta nada. El exceso de muebles y adornos es un enemigo directo de los metros cuadrados. Procura crear lugares fluidos y despejados, donde te puedas mover. Eso sí, tampoco hablamos de austeridad absoluta, sino de equilibrar necesidades con mobiliario y decoración.

6. Mi amigo el blanco. Este color, y todos aquellos que mantengan un tono suave y poco intenso, es un ayudante infalible. Multiplica los metros, potencia la luminosidad, hacer crecer la altura de los techos, aleja las paredes… Lo tiene todo para convertirse en la tonalidad de los espacios XS.

7. Y, por favor, mantén el orden. Sigue los principios de tu ‘gurú’ favorita –Marie Kondo, sin duda, ocupa un puesto de honor– y apuesta por una casa ordenada, donde no haya nada por medio y todo esté en su sitio. Revistas recogidas, cojines colocados, abrigos en el perchero… Esa (gratificante) visión ‘estira’ los metros, sin darte cuenta.

Lee: Orden en casa: la felicidad de tener todo en su sitio

VER GALERÍA

Cuestión de mobiliario

8. Elige piezas versátiles y de doble uso. Desde un sofá que se convierte en cama, hasta mesas que albergan cajones o cabeceros que son, al mismo tiempo, mesilla y estantería. También son una buena elección los modelos plegables y extensibles, ya que no ocupan, pero pueden dar de sí cuando los necesitas.

9. Apuesta por losmuebles y las telas en maderas o tonalidades claras, que no ‘roben’ demasiado protagonismo: si una pieza resulta tremendamente llamativa, no podrás apartar la mirada de ella y terminará asfixiando el espacio. Mejor, si son modelos de líneas sencillas, poco recargados y, a ser posible, no muy altos, para permitir la comunicación visual.

VER GALERÍA

Pon un espejo (mágico) en tu casa y tus espacios parecerán más grandes, además de mucho más luminosos. Los espejos ‘repiten’ las piezas y aportan sensación de profundidad.