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Fácil
Por
¡HOLA! COCINA
Estamos ante uno de los postres más tradicionales que hay en casi todos los recetarios dulces del mundo. Tan sólo necesitas para hacerlo, además de un molde con forma de flan o varios individuales, huevos, leche, azúcar y vainilla.
- 1 litro de Leche
- 8 ud de Huevo
- 250 g de Azúcar blanca
- 1 vaina de Vainilla natural
- 1 cucharadita de Zumo de limón
- 2 cs de Agua
- 2 cs de Azúcar blanca
-
1.
Abrimos con un cuchillo la vaina de vainilla longitudinalmente, sacamos las semillas con la punta y las echamos sobre la leche que pondremos en un cazo. Añadimos también la vaina.
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2.
Ponemos a calentar en el fuego, retiramos y tapamos para que infusione bien.
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3.
En un bol echamos los huevos y vamos batiendo con varilla mientras añadimos el azúcar y se blanquean.
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4.
Una vez que la leche esté templada, sacamos las vainas de vainilla y vamos añadiendo, sin dejar de batir, a la mezcla de huevos y azúcar.
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5.
Hacemos un caramelo con azúcar, agua y unas gotas de zumo de limón y cuando esté dorado lo echamos en una flanera grande o varias individuales por el fondo y las paredes.
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6.
Llenamos con nuestra mezcla y cocemos en un baño maría al horno durante 60 minutos a 170ºC.
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7.
Sacamos con cuidado, dejamos que se enfríe y metemos en la nevera hasta que vayamos a tomarlo que será cuando lo desmoldemos.
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8.
Podemos acompañarlo con poco de nata montada.
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