Es una salsa que se aromatiza con muchas hierbas y especias, como albahaca, cilantro, tomillo, romero, salvia, cominos, guindilla, etc. Ademite también verduras picadas, como pimientos, zanahorias, ajos, calabacines o berenjenas. Interviene directamente en las siguientes salsas: amalfitana, barbacoa, boloñesa, brava, etc y es parte esencial de numerosos platos como el pisto a base de calabacín (o berenjena), pimiento, cebolla y salsa de tomate; la pizza, gran cantidad de platos de pasta y multitud de guisos. Para los diabéticos, se puede sustituir el azúcar por canela molida, está deliciosa y tiene un toque peculiar.
- 1 Kg de Tomates maduros
- 2 ud de Cebolletas
- 4 cs de Aceite de oliva
- 1 pizca de Sal
- 1 pizca de Azúcar blanca
- 1 pizca de Pimienta negra
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1.
Con la punta de un cuchillo, hacemos una cruz en la base de los tomates y escaldamos 15 segundos en agua hiviendo.
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2.
Los pasamos a un cuenco con agua helada para parar la cocción y los pelamos.
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3.
Partimos por la mitad, retiramos las semillas y cortamos la pulpa en daditos.
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4.
Pelamos, lavamos y picamos las cebolletas con un poco de su verde.
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5.
Calentamos en una cazuela el aceite y sofreímos 5 minutos la cebolleta picada con una pizca de sal.
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6.
Añadimos los daditos de tomate, sal y la misma cantidad de azúcar y cocinamos a fuego medio 20 minutos.
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7.
Bajamos el fuego al mínimo y cocinamos 20 minutos más, hasta que se evapore toda el agua.
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8.
Trituramos si deseamos una textura más fina.
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