El 'carpaccio' hace referencia a una técnica consistente en cortar en lonchas muy finas una carne, un pescado, una fruta o una verdura, que se sirven y se aderezan. En muchas ocasiones, los ingredientes se congelan previamente para facilitar el corte y que no se rompa el producto. Vamos a hacer un sencillo y delicioso carpaccio de gambas rojas, al que añadiremos un poquito de caviar (puedes sustituirlo por huevas de salmón o trucha y nuestro bolsillo lo agradecerá). Ideal para cualquier estación del año y plato estrella para la Navidad.
- 250 g de Gambas rojas frescas
- Caviar
- Aceite de oliva virgen extra
- Brotes frescos
- 0.5 ud de Limón
- Sal en escamas
-
1.
Lo primero que debes hacer es pelar las gambas. No tires las cabezas ni la piel de las gambas ya que nos servirán para preparar un delicioso caldo de gambas.
-
2.
Ahora hay que quitarles el intestino (esa línea oscura que se ve por el lomo de la gamba), para ello realiza un pequeño corte en el lomo de la gamba y tira con cuidado del intestino intentarlo no romperlo.
-
3.
Corta cuidadosamente a lo largo y colócalas sobre un papel film o papel de horno haciendo un círculo.
-
4.
Cubre con otro papel film todo el círculo y aplasta con una espalmadera o en su defecto un cazo nos servirá. Aplasta hasta conseguir una fina capa de gambas y mételo en el congelador por espacio de una hora.
-
5.
Cuando vayas a servirlo, sácalo del congelador con antelación, retira el papel film y sirve en un plato cubriendo toda la superficie.
-
6.
Espolvorea con un poco de sal Maldon y añade unos brotes y un chorro de aceite de oliva virgen extra.
-
7.
Añade un poquito de caviar (o el sucedáneo que más te guste) por encima y unas gotitas de zumo de limón.
Más recetas de
MARISCO:
Últimas recetas: