A su llegada a Irlanda eran recibidos por el embajador de Reino Unido en Irlanda, Robin Barnett, entre otras personalidades. La primera parada era la reunión con el presidente del país, Michael D Higgins, y con su mujer, Sabina Coyne -actriz y activista-. Durante todo el encuentro, mantenido en la residencia oficial del mandatario, los duques de Cambridge se mostraron muy atentos y cariñosos con el matrimonio, intercambiando risas y confidencias. Así, les vimos de lo más divertidos con una de las mascotas de la familia, Brod, un perro de montaña birmano, y tomando té con galletas y pasteles