Quince años separan estas dos imágenes para el recuerdo de los Reyes

Doña Letizia ha rescatado de su armario el inolvidable traje de chaqueta que lució en su pedida de mano, que tuvo lugar el 6 de noviembre de 2003 en el Palacio de El Pardo

Por hola.com

Más de 15 años separan a estas imágenes. La de la izquierda fue tomada el 6 de noviembre de 2003. La de la derecha, esta misma mañana. Doña Letizia ha elegido el inolvidable traje de chaqueta de su pedida de mano para cumplir con su agenda oficial en Marruecos. Y nos ha hecho viajar en el tiempo. Al verla hemos recordado aquella mañana de otoño en el Palacio del Pardo en la que se mostró sonriente, nerviosa y muy enamorada del entonces príncipe de Asturias. Sin soltarse de la mano, la pareja reveló uno de los grandes enigmas de su relación: cuándo se conocieron. “Hace un más de un año. Un encuentro casual que no tuvo ninguna consecuencia. Fue en la primavera cuando tuvimos más contacto y aquello fructificó”. Y adelantaron el número de hijos que desean tener “por encima de dos y por debajo de cinco”.

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Más tarde confirmaron la fecha y el lugar de su boda: el 22 de mayo de 2004 en la Catedral de la Almudena. Desde entonces, don Felipe y doña Letizia han caminado en la misma dirección, formando una preciosa familia junto a sus dos hijas, la princesa Leonor, de 13 años, y la infanta Sofía, de 11. También se han enfrentado juntos a la abdicación de don Juan Carlos y la posterior proclamación de don Felipe como Felipe VI. Grandes cambios que han marcado su historia de amor, aquella que nació el 17 de octubre de 2002 durante una cena en casa del ya fallecido Pedro Erquicia

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Aquella noche no sucedío nada especial; no se produjo, entonces, ningún flechazo, pero los presentes se dieron cuenta de la “química” que existía entre ambos; de cómo “abandonan” la conversación general para charlar entre ellos de “sus cosas”. Doña Letizia no dejó indiferente a don Felipe y en tan sólo unos meses celebrarán 15 años de casados

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La Reina ha rescatado durante su visita a Marruecos el Armani de su pedida de mano. Un traje muy discreto, de líneas limpias, blanco -uno de sus colores preferidos-, y de corte muy moderno. El pantalón, ancho y recto, tapando parcialmente el zapato de alto tacón; la chaqueta, entallada, con el bajo ligeramente évasée, cuello chimenea, bolsillos al bies y tres botones. Fiel a su estilo de peinado y complementos, doña Letizia lució su media melena, desfilada, con mechas y raya al lado; maquillaje muy natural (tonos rosas) y discretas joyas. Unos pendientes en platino de brillantes; un sencillo reloj, una alianza triple cruzada yla maravillosa alianza de platino con diamantes talla 'baguette'.

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Hoy ha cambiado los zapatos negros de la pedida por unos salones beis y ha lucido los pendientes en oro blanco con diamantes y perlas australianas, que se alargan o acortan según el acto al que asista. Un conjunto compuesto por cinco diamantes talla brillantes, uno de ellos montado en doble chatón, que ha llevado en multitud de ocasiones. 

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Tras visitar el Mausoleo de Rabat, donde han honrado la memoria de Mohamed V y la de Hassan II, abuelo y padre de Mohamed VI, don Felipe y doña Letizia han recibido en audiencia, en la Embajada de España en Rabat, a escritores marroquíes en lengua española. El último acto de su visita oficial será una recepción de los Reyes, en la sede de la Biblioteca Nacional, a la colectividad española en Marruecos -en Marruecos residen unos 10.000 españoles--, a la que el Rey dirigirá también unas palabras. Don Felipe y doña Letizia regresarán a España el mismo jueves por la noche, tras una ceremonia de despedida con honores en el aeropuerto de Rabat.