Tratamiento de fertilidad©iStockimages

Fertilidad

La criopreservación de gametos, la técnica que permite que los hombres se conviertan en padres años más tarde

Se trata de una técnica que se lleva empleando décadas en España y a la que recurren, sobre todo, hombres que van a empezar a consumir ciertos medicamentos o que padecen determinadas enfermedades

La ciencia ofrece ya avances inimaginables hace tan solo unos años. Uno de los que más ha sorprendido en los últimos días es el hecho de que Ana Obregón se haya convertido en abuela tres años después de la muerte de su hijo, Aless. La pequeña Ana Sandra ha nacido mediante la gestación subrogada y la fecundación in vitro, pero además ha sido fundamental otra técnica: la de la criopreservación de gametos.

No es, sin embargo, una técnica novedosa. Fue en 1953 cuando se utilizó por primera vez en Estados Unidos y, 20 años después, en 1973, en España. Desde entonces, son muchos los hombres y las mujeres que recurren a ella por diferentes motivos. En el caso de las mujeres, es cada vez más habitual la decisión de congelar óvulos para garantizar la posibilidad de quedarse embarazadas más adelante, sin preocuparse de la urgencia del reloj biológico. En los hombres, se lleva a cabo sobre todo por motivos de salud.

Causas por las que los hombres recurren a la criopreservación

  • Enfermedades. Entre los principales motivos por los que, de manera general, los hombres recurren a la criopreservación de gametos se debe a la presencia de determinadas enfermedades -ya sean de transmisión sexual u otra sistémica-, así como a cambios hormonales. En cuanto a personas con cáncer, “lo que se recomienda es que la extracción de la muestra se lleve a cabo antes de empezar cualquier tratamiento de quimioterapia o radioterapia”, tal y como nos indica Isabel Vielsa, directora médica de Clínicas EVA, puesto que pueden dañar enormemente la calidad de los gametos. En cuanto a su conservación una vez extraído, no habría problema alguno y “no habría que hacer nada en especial en cuanto a su procesamiento”. Siempre que se haga antes de iniciar esos tratamientos, “a priori, si no se tiene una infección, de transmisión sexual ni de otro tipo, no se precisa un manejo especial”.
  • Consumo de medicamentos. El consumo de ciertos medicamentos, ya que algunos, como los anabolizantes, están directamente relacionados con la infertilidad. Junto a los anabolizantes, son muy perjudiciales la testosterona y el finasteride, que se prescribe para tratar la alopecia masculina. Ingerir testosterona puede inhibir la producción de testosterona de manera natural, mientras que el finasteride puede causar disfunción eréctil. Lo adecuado, por tanto, en todos estos casos es llevar a cabo la extracción antes de comenzar a consumir los fármacos.
  • Exposición a factores externos de alto riesgo. Un hombre expuesto (normalmente por su trabajo) a químicos y pesticidas, así como a campos electromagnéticos y a radiaciones se podrán ver gravemente afectados en lo que a fertilidad se refiere (además de otras posibles consecuencias que puede acarrear para su salud).
  • Hábitos no saludables. A todo esto hay que añadir que el consumo de alcohol, de tabaco y, por supuesto, de estupefacientes de manera continuada también alterará la fertilidad del hombre, al que también perjudicará al respecto el sobrepeso y la obesidad.
Tratamiento de fertilidad©iStockimages

Cómo es el proceso de criopreservación

1º Extracción. El primer paso del proceso es, evidentemente, la extracción de la muestra, que no necesita ser muy grande y que puede llevarse a cabo en casa para después trasladarla al laboratorio en cuestión.

2º Análisis de la muestra. Una vez extraída la muestra y antes de criopreservarla, es imprescindible hacer un seminograma, es decir, un estudio de la muestra para comprobar que no hay presente ningún tipo de enfermedad y para analizar la capacidad de fecundar de los espermatozoides.

3º Conservación. Después, se realiza la criopreservación en sí, congelando la muestra en un tanque de nitrógeno líquido a entre -80º y 196º bajo cero. Allí pueden permanecer por tiempo indeterminado. De hecho, hay hombres que se han convertido en padres 20 años después de haber criopreservado su semen, tal y como apuntan desde Clínicas EVA.

4º Utilización posterior de la muestra. Cuando llega el momento oportuno de convertirse en padre para quien había iniciado el proceso, tiene lugar la descongelación de la muestra. “La descongelación debe realizarse siguiendo un estricto procedimiento que garantice las condiciones en las que fue congelado, evitando su exposición a la luz solar y su contacto con otras sustancias”. Después, se procederá a llevar a cabo un tratamiento de fertilidad, ya sea inseminación artificial (sobre todo si es en la propia pareja del hombre) ya fecundación in vitro .