La presentadora Lara Álvarez ha dado a conocer a sus seguidores, a través de las redes sociales, que ha congelado óvulos. No tiene claro aún al cien por cien que quiera ser madre y tampoco se lo plantea “como una necesidad urgente” precisamente por eso, porque ha congelado óvulos. “Es una de las mejores decisiones que he tomado en mi vida”, asegura con contundencia. “Si no tienes claro el concepto de la maternidad, ya el reloj biológico te juega en contra, y muchas veces el momento profesional que tiene cada una o las aspiraciones o simplemente el ritmo de vida actual, hace que muchas veces nos metamos presión” para pensarlo.

De este modo, puede deliberar con más calma, “sin la sensación de prisa porque se acaba el tiempo”. Para ella, saber que tiene “la oportunidad ahí” de ser madre más adelante, “es una de las satisfacciones más grandes” que le ha dado la vida. Lo tiene tan claro, que anima a sus seguidores a hacer lo mismo: “si, de verdad, como mujer hay alguna duda, no os limitéis ni os cerréis”.

Es un hecho que se ha producido un retraso en la maternidad de forma generalizada, un hecho que se ha venido afianzando en las dos últimas décadas como consecuencia de factores sociales, económicos, laborales y también personales. Hoy en día quedarse embarazada a edades avanzadas, o consideradas tardías para la concepción, es más probable, y posible, gracias a las distintas técnicas de reproducción asistida que existen. Pero, además, si eres consciente de ello y tienes bastante claro que tu maternidad será más allá de los 35 años, quizás lo que más te interese sea realizar una vitrificación de ovocitos, también denominada vitrificación de óvulos o congelación de óvulos, la técnica a la que precisamente ha recurrido Lara Álvarez.

Sin embargo, también existen motivos médicos por los que está indicada. “Esta técnica consiste en la congelación ultrarrápida de los óvulos. Se trata de una técnica que permite preservar a las células en un estado de congelación para posteriormente poder descongelarlas y utilizarlas en el futuro con fines reproductivos”, nos explica Verónica Martínez Vidal (www.veronicamartinezvidal.com), ginecóloga y obstetra, experta en fertilidad de la Unidad de Reproducción Asistida del Hospital Universitario La Moncloa.

Según estudios publicados, la tasa de embarazo mediante este tipo de técnica es similar a la de embarazos con óvulos en condiciones normales, y además, se puede decir, que la vitrificación de ovocitos tiene una serie de ventajas asociadas, como por ejemplo “poder disponer de óvulos con la edad actual que no sufran envejecimiento celular y su posterior uso en el futuro. También va a permitir hacer una preservación de la fertilidad en pacientes que tengan que recibir un tratamiento tóxico para sus gametos como los tratamientos oncológicos, o en enfermedades que pueden disminuir prematuramente la reserva del ovario como la endometriosis”, nos cuenta la experta.

Cómo se lleva a cabo la vitrificación de ovocitos

El procedimiento de la vitrificación, o lo que es lo mismo de la congelación de óvulos, conlleva la solidificación de estos en crioprotectoras que contienen nitrógeno líquido a -196 ºC. Esto hace posible que los ovocitos se congelen de forma ultrarrápida y se puedan almacenar hasta que sean utilizados por la paciente para una posterior Fecundación in Vitro (FIV), llegando hasta incluso más de 20 años de conservación.

Pero, ¿cómo es la recolección de los óvulos? “Se realiza mediante la estimulación ovárica controlada con gonadotropinas, que son las hormonas encargadas del desarrollo de los óvulos en los ovarios. Para ello, es necesario comenzar generalmente con el tratamiento cuando baja la regla, de esta manera y mediante la inyección hormonal (en una única dosis diaria), vamos a poder hacer que sea posible extraer más de un óvulo en un mismo ciclo, permitiendo la congelación (si la reserva del ovario es buena) de varios óvulos. La extracción de los óvulos se realiza vía vaginal con sedación en un proceso ambulatorio”, explica la doctora.

Es decir, los pasos serían los mismos que para una FIV, pero en vez de inyectar los óvulos extraídos en ese momento, se congelan hasta que la paciente decida cuando utilizarlos. “Normalmente, la estimulación va a durar entre 8-10 días, por lo que en un par de semanas se podría completar el tratamiento”, aclara la ginecóloga.

Cuándo está indicado este tratamiento

En cuanto a la edad, la doctora es muy clara: “La mejor, médicamente, es en mujeres menores de 35 años. Es recomendable realizarlo a esas edades porque mejoran los resultados y las tasas de embarazo, debido al efecto deletéreo de la edad sobre la reserva ovárica. Pero si se supera esa edad, también es posible vitrificar óvulos, aunque los resultados pueden ser menos óptimos”. Pero, los motivos de la vitrificación de óvulos son muy diversos. Estas son algunas de las principales razones que puede llevar a elegir este procedimiento:

• Mujeres que quieren posponer su maternidad por motivos personales.
• Aquellas que tienen que someterse a una cirugía de ovarios y se prevé perder parte de la reserva ovárica.
• En pacientes que van a recibir tratamientos gonadotóxicos, tal y como nos comentaba la doctora anteriormente, como pueden ser en pacientes oncológicas y no oncológicas.
• En otros casos de patología médica como endometriosis o enfermedades autoinmunes que disminuya la reserva ovárica.
• En casos en los que las mujeres tienen pocos ovocitos y se requiere hacer una acumulación de estos.

Si la razón por la que realizar este tratamiento es posponer la maternidad, las dudas más frecuentes que les asaltan a la mayoría de las mujeres son, por un lado, el coste, y por otro, los posibles efectos secundarios.

“El coste del tratamiento puede oscilar entre los dos mil y poco euros a tres mil, por ciclo, dependiendo también de la medicación necesaria. Las pacientes que pueden tener cobertura por el sistema de la Seguridad Social son aquellas en las que esté indicada una vitrificación ovocitaria por motivos médicos (por ejemplo: pacientes oncológicas, endometriosis avanzadas, quistes ováricos bilaterales, etc). No está incluida la preservación por decisión personal”, aclara la especialista.

En cuanto a las posibles consecuencias que puede conllevar la vitrificación de ovocitos, la experta nos cuenta que, como cualquier tratamiento médico, este no está exento de posibles riesgos o efectos secundarios. “Habría que personalizarlos en cada paciente, por eso se debe de realizar una valoración médica individualizada por un profesional especialista. Haciendo esta apreciación, en la gran mayoría de los casos, al tratarse de un tratamiento de corta duración, los efectos son muy bien tolerados”, nos dice. Y especifica en su exposición: “Los efectos secundarios vienen derivados de la producción hormonal y pueden ser los mismos que se tienen previamente a la bajada de la menstruación con sensación de abdomen hinchado, tensión mamaria, en algunos casos cefalea, etc. y estos efectos remiten una vez finalizado el periodo”.