En función de los 'toppings' que le sumemos (distintos tipos de frutas, cereales...) podemos customizar como queramos nuestros pudins de semillas de chía. Una opción alternativa y saludable para los desayunos o meriendas. En este caso lo vamos a acompañar con yogur griego y unas frambuesas.
- 1 taza de Leche
- Semillas de chía (dos o tres cucharadas)
- Miel u otro endulzante al gusto (opcional)
- Yogur griego
- Frambuesas
- Menta o hierbabuena para decorar
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1.
En un tazón, mezcla la leche con las semillas de chía.
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2.
Agrega el endulzante al gusto si lo deseas. Remueve bien para asegurar que todos los ingredientes estén bien integrados.
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3.
Deja reposar la mezcla en el refrigerador durante al menos 2-3 horas o durante la noche. Durante este tiempo, las semillas de chía absorberán el líquido y formarán una consistencia de pudin. Remueve la mezcla después de la primera hora para evitar que las semillas de chía se agrupen.
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4.
Cuando vayas a consumirlo sirve el pudin en un vaso. hasta 3/4 de su capacidad. Suma una capa de yogur griego.
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5.
Coloca frambuesas encima y decora con unas hojitas de menta o hierbabuena.
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