Los pimientos permiten gran cantidad de usos en la cocina; rellenos, asados, cremas, estofados, etc. Hoy os presento una receta contundente de pimientos rellenos que reúne diversos ingredientes que casan bastante bien entre sí. Vamos a afinar el tradicional puré de patatas para convertirlo en parmentier y hacerlo más cremoso, al que vamos a añadir un refrito de cebolla para levantar el sabor del plato.
- 6 ud de Pimiento rojo de asar
- 350 g de Salmón fresco
- 3 ud de Patata grandes
- 1 Cebolla blanca, grande
- 100 ml de Nata para cocinar
- 1 nuez de Mantequilla
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta negra
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1.
Salpimentar y pasar el salmón por una sartén con poco aceite a fuego medio-alto. Depositarlo en papel absorbente, y una vez frío, eliminar la piel y espinas. Desmenuzar, y reservar.
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2.
Picar la cebolla y sofreír en poco aceite a fuego medio durante 10 minutos hasta que llegue a dorar un poco y escurrir en papel absorbente.
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3.
Cocer las patatas sin piel durante 25 minutos a fuego medio en un litro de agua y una cucharada de sal. Reservar el agua de la cocción.
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4.
Una vez hervidas las patatas, depositarlas en una olla, añadir la nuez de mantequilla y aplastar con un tenedor. Añadir la cebolla, la nata y 150 ml del agua de la cocción. Batir con batidora eléctrica hasta obtener un puré homogéneo.
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5.
Añadir el salmón al puré y reservar.
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6.
Una vez lavados lo pimientos, cortar en horizontal la parte superior para crear una tapa. Eliminar las semillas y partes blancas, rellenarlos con el puré y tapar con la parte superior.
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7.
Colocar los pimientos sobre una fuente y hornear a 180 grados durante 30 minutos.
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1.
Servir los pimientos de forma individual acompañados de una ensalada de rúcula y tomates cherry aliñada con zumo de lima, aceite de oliva virgen extra y sal.
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