En apenas veinte minutos, tienes un postre delicioso, saludable y muy aromático con esta fruta de temporada que, por su tamaño, permite crear pequeñas raciones. Si te sobra, no lo dudes y guárdalas. Además, puedes ir probando con otras hierbas aromáticas.
- 1 kilogramo de Albaricoques
- 100 ml de Miel
- 40 g de Mantequilla
- Tomillo en rama
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1.
Precalentamos el horno a 180 ºC.
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2.
Lavamos y secamos bien nuestros albaricoques.
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3.
En una sarten antiadherente, ponemos a derretir nuestra mantequilla y, a continuación, doramos nuestros albaricoques enteros. Removemos sin parar durante unos 5 minutos.
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4.
Bañamos con miel, añadimos las ramitas de tomillo y metemos en el horno durante 10 minutos, que veamos que se han ablandado y que están doraditos. Retiramos y servimos.
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