Dentro de unos meses celebrarán su décimo aniversario de boda y siguen tan enamorados como siempre. La historia de amor de Athina Onassis y Doda Miranda es una de esas que nació de manera discreta, enfrentando vientos y mareas, y se ha mantenido del mismo modo durante este tiempo.
Apenas se dejan ver en eventos públicos, sólo las competiciones hípicas en las que ocupan su tiempo y vuelcan su pasión son testigos de su cariño. Juntos han formado una familia unida con Viviane, la hija que tenía Doda de su matrimonio con Sibele Dorsa, y han desafiado los comentarios que aseguraban que los once años de diferencia de edad que les separan serían un obstáculo.
Una familia unida y feliz de la que estar muy orgulloso. Así lo refleja el jinete brasileño en sus redes sociales, en las que presume de esposa e hija. Esta última, que era apenas una niña de cinco años cuando su padre se casó, demuestra tener una excelente relación con Athina con la que posa así de sonriente –ella la trató como una hija cuando comenzó su relación con Doda a pesar de que no había cumplido todavía los 18 años.
Viviane es ahora una belleza de quince años que sigue los pasos de su padre y Athina en la competición hípica, tal y como este muestra en sus redes. “Orgulloso de mi hija por los óptimos resultados en Saint-Tropez. Esos resultados son fruto de toda su dedicación y amor por los caballos” escribe. Se crió en ese mundo, claro.
Doda Miranda y Athina Onassis se enamoraron en el año 2002, cuando ella no había cumplido aún los 18 años. La diferencia de edad que les separa dio entonces mucho que hablar, pero estaba dispuesta a apostar por su amor y, cuando cumplió la mayoría de edad, decidió seguir al jinete a Brasil. Se casaron en diciembre de 2005 y desde entonces han mantenido una vida discreta y estable, lejos de la expectación mediática, en la que han demostrado que su amor sigue fuerte y sólido, como el primer día.
