Sube al Tren de los Molinos y viaja por la tierra de los gigantes 

Madrid y Campo de Criptana están unidas por un trayecto de ida y vuelta que, a lo largo de un día, permite disfrutar de molinos de viento, del viñedo más grande del mundo y de los platos más sabrosos de la cocina manchega, entre muchas otras cosas. Un plan sostenible para pasar una divertida jornada en tierras manchegas.  

Por hola.com

Dejar el bullicio de la ciudad y adentrarte en la tranquilidad de la llanura manchega. Sin atascos de salida, sin tener que preparar maletas. Para viajar en el Tren de los Molinos solo hay que reservar billete, subirse al tren y abrir los ojos, porque en el escenario de la batalla literaria más famosa de don Quijote contra los molinos de viento esperan un montón de propuestas apetecibles. 

El tren tiene como punto de partida la estación de Chamartín, hace una parada en la de Atocha Cercanías y emprende un viaje de hora y media por tierras manchegas amenizado por un grupo de actores que dan vida, entre otros, al mismísimo Miguel de Cervantes. Es él mismo el que explica a los viajeros qué le inspiró a escribir el capítulo VIII de su universal novela y todos los planes que van incluidos con el billete al llegar al destino: Campo de Criptana. 

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DEGUSTAR EL VINO DEL MAYOR VIÑEDO DEL MUNDO 

Después del romántico viaje en tren, la primera parada, a media mañana, es una aproximación a uno de los principales tesoros de Campo de Criptana, su mar de viñas. Y es que Castilla-La Mancha posee la mayor extensión de viñedos del mundo. La visita a la bodega Castiblanque, que trabaja 120 hectáreas de esta inmensidad, abre sus puertas para descubrirlos con una degustación en la que no falta, como acompañamiento, bocados de la cocina manchega tradicional.  

GACHAS, MIGAS, SOPA DE AJO...

La segunda parada de este viaje por tierras manchegas lleva hasta un cerro que regala una buena perspectiva de la localidad y donde se localiza un pozo de nieve, uno de esos ejemplos de arquitectura popular del siglo XVIII que servía para almacenar y conservar hielo para luego su distribución y venta. Hasta 190 toneladas de hielo y escarcha, obtenidos de la nieve que caía en esta meseta, llegaba a albergar esta construcción. Muy cerca se encuentra el santuario del Cristo de Villajos, patrón de Campo de Criptana, un lugar especial antes del homenaje con la gastronomía local. 

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Para recuperar fuerzas, lo que espera después son gachas, cordero a la caldereta, migas, pisto, sopa de ajo o una buena tapa de queso manchego regada con un buen vino de la tierra que se sirven en alguno de los restaurantes y bares locales, y que se reservan a elección del viajero. 

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LOS GIGANTES DE DON QUIJOTE 

La sierra de los Molinos es el tercer escenario de este plan de viaje. Es la seña de identidad de Campo de Criptana, la imagen que pone a esta localidad manchega en el mapa a nivel mundial, pues aquí fue donde el ingenioso hidalgo don Quijote de La Mancha luchó incansable contra unos gigantes, que no eran más que molinos de viento haciendo girar sus aspas. 

Un paseo por este paraje icónico conecta inmediatamente con el Siglo de Oro y con las tradiciones que, desde el siglo XVI, han ayudado a desarrollar una economía sustentada en el cereal. Se mantienen en pie solo una decena de la treintena original y de ellos los mejor conservados son los llamados Sardinero, Burleta e Infanto. Entrar a conocer su mecanismo que, siglos después, sigue funcionando será el preámbulo a la siguiente parada. 

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CENTRO DE INTERPRETACIÓN DEL MOLINO 

En él se puede conocer la historia de los molinos de vientos, los diferentes tipos que existen, la maquinaria que utilizan para moler el grano, sus elementos, la importancia que tuvieron para la economía local y su vínculo con El Quijote. El recorrido por el centro permite ver molinos a escala, fotografías, vídeos y piezas únicas como aspas, ejes y palos de gobierno de estos gigantes manchegos. 

EL ENCANTO DEL ALBAICÍN MANCHEGO

Perderse por el laberinto de callejuelas que dibuja el barrio del Albaicín es la mejor manera de despedirse de Campo de Criptana. Un baño de azules vibrantes y blancos relucientes de cal y pintura, atrapados entre suelos empedrados y tejas árabes, con el que acabar la aventura vivida al estilo del ingenioso hidalgo de La Mancha. 

¿Cuándo funciona? 

El tren turístico circula los próximo 11 y 18 de junio, 10 y 24 de septiembre y 8 y 22 de octubre. 

¿Cuánto cuesta el viaje? 

El precio de los viajes, de ida y vuelta en el día, es de 45 € para adultos y 20 € para menores de 14 años. Los niños hasta 4 años que no ocupen asiento viajan gratis.