A una hora de Oviedo y desviándonos por la N-625 desde Arriondas se llega muy rápido a Cangas de Onís, entre las imponentes montañas de los Picos de Europa y el río Sella. Con un entorno como este, el flamante nuevo pueblo mágico (pueblosmagicos.es) es un lugar para disfrutar de la naturaleza con mayúsculas, pero además resulta perfecto como campamento base, porque tiene un interesante casco antiguo, reclamos monumentales y una extensa oferta de alojamientos, restaurantes y todo tipo de servicios.
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Lo primero al llegar es ir a ver su llamado Puente Romano sobre el río Sella, que en realidad no es de época romana, sino medieval y una de las imágenes más típicas de Asturias, de cuyo arco central cuelga la Cruz de la Victoria. Después hay que buscar la calle San Pelayo, donde se concentra el casco antiguo, con edificios históricos que muestran escudos en su fachada, como la Casa de Soto o la Casa de la Capitana, en la plaza del Mercado, además de la iglesia de la Asunción. En el camino, numerosas tiendas nos invitan a entrar para comprar productos típicos, desde el queso gamoneu a la ternera asturiana.
Para descubrir también, la iglesia de Santa María de Cangas, ya sin culto y reconvertida ahora en el Aula del Reino de Asturias, que acoge un montaje expositivo y audiovisual, y el túmulo funerario ubicado en el interior de la ermita de Santa Cruz y que data del 4.000 a.C.
Pero es hora de disfrutar del entorno y el mejor lugar para conocer todas las posibilidades de rutas es pasar por la Casa Dago, ejemplo de la mejor arquitectura señorial montañesa y en la que se encuentra instalado el centro de información del Parque Nacional de los Picos de Europa. El recorrido imprescindible arranca en el mismo pueblo, tomando la carretera A-262 y lleva, en unos 20 minutos, a la basílica de Covadonga y la cueva donde se venera a la Santina, la patrona de Asturias, uno de los principales centros de peregrinación cristiana en Asturias e íntimamente ligado al inicio de la Reconquista en el año 722.
Siguiendo la misma carretera, 20 kilómetros más arriba esperan los lagos de Covadonga, por encima de los 1000 metros de altura. El reflejo de las montañas en las aguas cristalinas de los lagos glaciares Ercina y Enol regala imágenes tan espectaculares como las de sus miradores del Rey, del Príncipe o Entrelagos.
DÓNDE DISFRUTAR DE LA BUENA MESA
En El Molín de la Pedrera (elmolindelapedrera.com), a cargo de la familia Ardines desde hace 35 años. Recetas asturianas es el restaurante Los Arcos (loslagosnature.com), de cocina tradicional renovada con productos orgánicos y elaborada por el reconocido chef Ramón Celorio. Y otra acertada elección es el restaurante del Parador de Cangas (parador.es), con platos del recetario asturiano.
Y DE UN MERECIDO DESCANSO
En el hotel gastronómico La Cepada (hotellacepada.com), con vistas maravillosas desde sus habitaciones. A orillas del río Sella, en el Parador de Cangas (parador.es), que ocupa un antiguo monasterio, y en El Quesar de Gamoneo (elquesardegamoneo.com), un hotel rural con todas las comodidades rodeado de naturaleza.
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