Descubre Troia Resort y visita Portugal en tus vacaciones

Experiencias únicas en el paraíso eco-chic de Troia

A solo una hora de Lisboa, esta alargada península que forma frente a Setúbal una estrecha lengua bordeada de una playa infinita es uno de los secretos más exclusivos de Portugal. Un paraíso de espíritu ecológico y sostenible donde el lujo se vive de forma natural y desenfadada. Algunas celebrities ya lo han descubierto.

by HOLA.COM PARA TROIA RESORT

CAMINA POR UNA PLAYA SIN FIN

Troia Mar, Bico das Lulas, Galé, Atlántica y Camarinhas, y luego ya está Comporta. A la península de Troia la bordea un infinito arenal de 15 kilómetros de longitud en el que se van sucediendo playas y playas respaldadas por dunas, arbustos aromáticos y bosques de pinos. Es ideal para tomar el sol, que aquí siempre está presente, bañarse, caminar o disfrutar en soledad. Y fácil que cada uno encuentre su sitio en este paraíso virgen.

VER GALERÍA

ALÓJATE EN UNA VILLA DE LUJO

No hay refugio más exclusivo en Portugal que las villas y casas de lujo de Troia, escondidas entre las dunas y la vegetación. Lujo por sus amplios espacios abiertos, sus ventanales que inundan de luz el interior, el diseño de su construcción, sus jardines y también su privacidad. Son perfectas para disfrutar de la naturaleza más virgen y, a la vez, vivir a tu aire. Cuando se buscan momentos compartidos nada como pasar por el Beach Club, con un ambiente sofisticado y vistas al mar.

VER GALERÍA

SAL EN BUSCA DE LA HUELLA ROMANA

En época romana, Troia era una isla, la de Achale, bañada por el océano. Gracias a la riqueza pesquera y a la producción de sal en las orillas del río Sado, se creó en el siglo I un gran centro de producción de salazones de pescado, el mayor del mundo romano. Un paseo por sus ruinas permite admirar sus diferentes factorías, pero también otras construcciones que formaban parte del gran complejo en el que se convirtió: termas, cementerio, mausoleo, casas y hasta una basílica paleocristiana.

VER GALERÍA

HAZ UNA EXCURSIÓN EN BICICLETA

Una senda ciclista rodea la península de Troia, así que la mejor manera de descubrir este valioso entorno rico en biodiversidad en el que se han inventariado hasta 600 especies de flora y fauna es pedaleando por su naturaleza inexplorada. Los alojados en las villas tienen la posibilidad de poder realizar esta y otras actividades organizadas en exclusiva: rutas por los alrededores con picnic, birdwatching, visitas privadas a las ruinas, clases de yoga, actividades náuticas…

JUEGA AL GOLF JUNTO AL MAR

Difícil soñar un decorado más idílico para probar el swing que el de Troia Golf, porque jugar unos hoyos en este campo que se extiende a orillas del Atlántico a lo largo de seis kilómetros mientras se contemplan vistas espectaculares no tiene precio. Así es fácil de entender porque está considerado el segundo mejor de Portugal y uno de los mejores de Europa. Y además es para todos los niveles.

AVISTA DELFINES

Pero en la reserva natural del estuario del Sado, además de aves, también habita una colonia estable de delfines nariz de botella, algo insólito en una bahía portuaria europea. Desde la marina de Troia se puede salir en barco para observar sus acrobacias, porque se dejan ver con facilidad.

VER GALERÍA

DISFRUTA DE UNA COMIDA EN LA PLAYA DE COMPORTA

Comporta es la continuación de Troia, una minúscula aldea rodeada de campos de arroz a la que hay que acercarse para visitar tiendas como Lavanda (lavandacomporta.com), de las que han quedado prendadas algunas celebrities, conocer el museo del arroz, pero, sobre todo, comer pescado fresco en la terraza de Comporta Café (comportacafe.com.pt), con los pies en la misma playa. 

EN FERRY AL MERCADO DO LIVARMENTO

Para llegar a Troia hay que tomar el ferry que une en unos minutos la península con Setúbal. Esta presume de playas, de su siempre animada Avenida Luísa Todi, con edificios notables, esculturas y bares donde tomar el típico choco, también del convento de Jesús, una joya del estilo manuelino, pero, sobre todo, de su Mercado do Livramento, donde se vende el pescado fresco entre las paredes forradas de azulejos de un edificio art decó.

VER GALERÍA

OBSERVA AVES EN EL SADO

El entorno de Troia no puede ser más natural; enfrente, la abrupta sierra de Arrábida; a un lado, el océano Atlántico, y a otro, la privilegiada bahía del estuario del Sado, una de las más bellas del mundo y de las más vivas, porque es el hogar permanente o estacional de más de 200 especies de aves. En la laguna que se forma en la península hay observatorios para verlas e identificarlas.

Más información: Troia Resort

Más sobre: