Esta semana se cumple un mes de la nueva vida de la princesa Leonor en el Reino Unido, que durante los dos próximos años estará cursando el bachillerato internacional en Gales. Han sido cuatro semanas en las que UWC Atlantic College ha combinado el programa académico con momentos lúdicos encaminados a que los nuevos alumnos se conozcan entre sí y comiencen a crear unos lazos que, según asegura el centro educativo, mantendrán el resto de su vida. Entre las actividades celebradas hay una que se ha centrado en la diversidad, algo de lo que presume un colegio que cuenta con alumnos de hasta noventa nacionalidades distintas.
Es habitual que los alumnos, a los que se les pide que lleven poco equipaje porque tienen que compartir habitaciones de cuatro, metan entre su ropa la bandera de su país. Las usan para decorar el centro, como señal de nostalgia y también como un gesto de representación en un contexto internacional. Lo que es novedoso es que hay algunos que también llevan en la maleta su traje regional y esta semana se ha podido ver en los jardines que rodean al castillo medieval en el que está el centro una sesión de fotos con las vestimentas típicas de cada país.
James, un alumno vietnamita ha vestido su Áo dài; mientras que Mariam, de Palestina, ha llevado una túnica con los bordados tradicionales que confecciona las artesanas de su país; un par de estudiantes de Bangladesh, Sumaiya y Zayer, también se han unido e incluso han posado juntos en el set de fotografía improvisado que ha puesto en marcha los propios alumnos, hay que recordar que es obligatorio que cada alumno haga dos horas a la semana de actividades artísticas y la fotografía es una de ellas.
El listado es largo y así se han podido ver a alumnos de Uganda, Zimbabue, Serbia, Bután, Noruega, Macedonia, Japón, Eslovaquia y Grecia. De momento se desconoce si la princesa Leonor ha participado en esta iniciativa para que los alumnos se familiaricen con los trajes regionales de otros países, tampoco se ha visto a la princesa Alexia, que también ha empezado este año a estudiar allí, pero, curiosamente, la Familia Real holandesa sí ha estado representada.
Beau y Eddy, dos alumnos holandeses, han acudido a la cita con los fotógrafos vestidos de naranja, explicando que es el color de la Familia Real de los Países Bajos, la Casa de Orange. También contaron que cada 27 de abril todo el mundo sale a las calles vestido de naranja para celebrar el Día del Rey, una fiesta en la que cada año participa la princesa Alexia junto a sus padres, los reyes Guillermo y Máxima. La alumna holandesa señaló que su camisa lleva una foto de una lata de Heineken, la marca de cerveza del país de la que están especialmente orgullosos por su presencia en el extranjero, porque es “el verdadero espíritu de la cultura holandesa”.
