La evolución de cada niño siempre tiene un ritmo de desarrollo particular, por lo que las comparaciones, en estos casos, no son fiables. En primer lugar, es importante saber que la comunicación de un niño comienza desde su nacimiento y no cuando nosotros queremos que el peque comience a hablar. “Los bebés utilizan el llanto, los sonidos guturales, la mirada, el balbuceo, la sonrisa… es decir, hay algo más allá de las palabras. Pero el lenguaje oral, propiamente dicho, comienza alrededor de los 12 meses, ya que encontraremos a niños que dicen agua con 9 y otros que empiezan a decir esa misma palabra cuando tienen 14. Hablamos de algo orientativo”, nos explica Andrea Plana González, logopeda y gerente de Logrospedia (@logrospedia), especializada entre otros ámbitos en atención temprana.
Es importante que los padres conozcan cuáles son los signos de alarma, eso sí, ¡sin obsesionarse! para poder detectar y resolver el problema en cuestión lo antes posible. “Ocuparse más que preocuparse, si se da en su hijo. Algunos ejemplos pueden ser: que con 2 años no diga alrededor de 50 palabras, no haga combinaciones de dos palabras o no comprenda instrucciones sencillas y directas”, indica.
Pero, a veces queremos ayudarles a incrementar su aprendizaje pero no lo hacemos del todo correctamente, ¿cuáles son los principales errores que cometemos al estimular el lenguaje de los peques? La experta nos los detalla a continuación.
¿Cuándo empezará a hablar y cuáles serán sus primeras palabras?