Y llegó el gran día. El 26 de agosto, coincidiendo con el día que se casaron sus abuelos, María y Alfonso se dieron el 'sí, quiero' en el Monasterio de Nuestra Señora del Carmen en Boltaña, a unos veinte minutos de Ligüerre de Cinca, en el Pirineo aragonés. La suya fue una ceremonia llena de momentos emotivos, oficiada por un sacerdote amigo de la familia y en la que participaron personas importantes de la vida de los novios.
Muy especial fue también la música. "Hicimos una misa baturra (es decir, cantada por un grupo tradicional aragonés) compuesta por jotas especiales de mi familia y también haciendo un guiño a la familia de Alfonso. La jota más especial fue la de mi entrada S’ha feito de nuey; es una jota en fabla preciosa que habla de lo que significa el amor y un matrimonio. Es la jota de mi familia y es ya una tradición que cuando nos casamos es la jota que acompaña la entrada de la novia. El otro momento muy especial fue al final de la misa cuando cantaron una versión de la Salve Rociera en honor a la abuela y la familia andaluza de Alfonso; muy muy emocionante".
- Un vestido de novia lleno de detalles 'vintage' para Teresa, la madrileña que se casó en Asturias