En estos días en los que recibir en casa es casi imprescindible, aparte de velas y guirnaldas, piensa que una forma preciosa y muy natural de decorar tu hogar con un aire navideño es con plantas y flores especiales y únicas. Seguro que estarás pensando en la poinsettia o flor de Pascua como la opción más segura, pero debes tener en cuenta también todas las alternativas que te presentamos, pues son perfectas para adornar durante estas fiestas. Además, te damos una pequeña guía acerca de cómo cuidar de ellas.

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Poinsettia o su variante en forma de copa

Sí, comenzamos con la poinsettia o flor de Pascua (Euphorbia pulcherrima), que se ha convertido en todo un clásico en la decoración navideña y que tiene unas bellas y características hojas aterciopeladas rojas. Pero ten en cuenta que aparte de este típico color también las encontrarás en amarillo, blanco y rosa. Las hojas de colores no son flores, y se tiñen de estas tonalidades desde noviembre hasta febrero siempre que la planta no reciba luz durante 12 horas al día.

Una modalidad muy elegante y original es la que vemos en la propuesta, de April Plants, en forma de copa, que consiste en un tallo limpio y recto coronado con ramas en ‘flor’.

Esta planta originaria de México es delicada, así que no la sitúes donde reciba corrientes de aire ni un exceso de calefacción. En la horquilla de temperaturas en las que se siente cómoda es entre 14 y 25º C, asimismo, ten en cuenta que no tolera los cambios bruscos de temperatura. Sitúala donde reciba luz pero no directamente los rayos solares y, normalmente, con regarla dos veces por semana será suficiente. En enero o febrero, poda la planta y en primavera, trasplántala a una maceta de mayor tamaño.

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Cactus de Navidad

El cactus de Navidad (Schlumbergera) es otra planta muy apreciada para decorar en fiestas pues durante esta época se llena de preciosas flores. Se trata de una suculenta de ciclo de vida perenne originaria de Brasil que, como afirman desde Be.Green: “es perfecta para cultivar en maceta durante toda su vida, ya que no crece mucho, alcanzará solo los 40-50 cm como máximo”.

Es una planta resistente y de fácil cuidado. En interior, búscale un lugar soleado y sin corrientes de aire y riega una vez por semana en invierno, aunque en verano deberás hacerlo con más frecuencia, como mínimo dos veces por semana. Por cierto, se lleva bien con niños y mascotas.

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Ciclamen

El ciclamen (Cyclamen), también conocido como flor de invierno, es una planta bulbosa originaria de las regiones mediterráneas orientales y, como llevamos viendo, es otra de las pocas plantas que florece durante la temporada de otoño e invierno, por lo que resulta muy ornamental y perfecta para convertirla en protagonista de esta Navidad.

Dos aspectos vitales a tener en cuenta sobre el ciclamen: si la planta está expuesta a temperaturas demasiado altas su floración se detendrá y nunca hay que situarla expuesta al sol directo porque quemaríamos sus hojas. Así pues, encuentra un lugar fresco de la casa donde situarlo y no lo riegues en exceso, hazlo cuando el sustrato comience a estar seco y, preferiblemente, por inmersión ya que no tolera que le mojen las hojas ni las flores.

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Azalea

La azalea (Rhododendron) es una preciosa planta que lucirá perfecta en un aparador o incluso el centro de la mesa de comedor. En sí se trata de un arbusto de exterior, aunque se puede tener en casa siempre que mantengamos su tierra húmeda (¡riégala a diario!).

Debe recibir luz indirecta y aparte del riego, conviene pulverizar sus hojas una vez a la semana. En Be.Green dan este consejo: “si tu azalea ha perdido todas sus flores, déjala 2 meses sin recibir nada de luz y empezará su proceso de floración de nuevo”.

Ten cuidado si tienes mascotas en casa, porque la azalea es una planta tóxica, al igual que la poinsettia o el ciclamen.

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Rosa de Navidad

La rosa de Navidad o eléboro (Helleborus niger) es una planta a la cual le gusta el frío, así que si la tienes dentro de casa durante las fiestas, aprovechando que luce preciosa con su abundante floración, luego trasládala al exterior: a la terraza, el balcón o el jardín. El motivo no es otro es que el calor y la sequedad de los ambientes interiores terminarán marchitándola. Procúrale un rincón luminoso lejos de fuentes de calor.

Sus grandes y hermosas flores, que suelen surgir entre noviembre y abril, pueden ser de tonalidades diversas y también variegadas. La de la imagen, blanca con matices de color verde, la venden en Be.Green.

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Falso ciprés

Si no tienes espacio para instalar un árbol de Navidad de gran tamaño, con esta versión mini tienes la solución perfecta porque cabe en cualquier rincón. Se trata de un falso ciprés (Chamaecyparis) de venta en April Plants con algunas decoraciones incluidas, que tú puedes completar con otros adornos; también viene con la funda de la maceta en una tela de yute.

Esta conífera siempreverde no debe recibir sol directo y le conviene una humedad ambiental alta. Deberás regar cuando el sustrato se seque, en épocas frías, mientras que durante el verano hay que hacerlo una vez por semana. Desde April Plants ofrecen este tip: “poda las puntas marrones, habituales a finales de invierno, para que en la primavera crezcan nuevas ramas”.

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Bonsáis

Otras plantas muy decorativas y que van a decorar con acierto la Navidad y, por supuesto, el resto del año son los bonsáis, árboles en miniatura cultivados en maceta. Los más apropiados que nos recordarán al invierno son, por ejemplo, los de pino u abeto.

Los bonsáis deben estar en un lugar que reciba el mayor sol posible durante el invierno, pero el resto del año es mejor que no les incidan los rayos solares directamente. Se trata de plantas que piden riego abundante, algo menor cuando llega el frío. Y sí, van a requerir que los podes para mantener la forma que más te guste.

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Ardisia

Llamadas popularmente bayas de Navidad, las ardisias (Ardisia Crenata) son un pequeño arbusto con frutos rojos intensos y muy típicos, que se pueden situar tanto en exterior como en interior. Es una hermosa planta con hojas en un tono verde intenso que logran resaltar el vibrante rojo de las bayas y que te va a pedir sol, sí, pero no directo. Por cierto, ¿quieres que tu planta dé frutos? Desde Be.Green aconsejan “frotar suavemente las flores con un pincel fino para que se produzca una mejor polinización”.

Plantada en el jardín cuidado cuando bajan las temperaturas pues no tolera bien que el termómetro marque menos de 7º C. No es exigente con el aporte de agua, el riego debe hacerse solo cuando el sustrato ya no esté húmedo.

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