Una sopa, además de hacernos entrar en calor, puede aportarnos numerosos beneficios saludables. Vamos a preparar un caldo de cebolla inicialmente -un vegetal que destaca por sus propiedades depurativas y diuréticas- para esta sopa, a la que pondremos otros vegetales como puerro, ajo, zanahoria, etc. Al final, la vamos a aromatizar con eneldo que aporta ligeros toques anisados, dulces y amargos.
- 1 litro de Agua
- 1 unidad de Cebolleta
- 2 ud de Chalota
- 0.5 unidad de Cebolla morada
- 2 dientes de Ajo
- 1 unidad de Nabo
- 2 ud de Zanahoria
- 1 unidad de Puerro
- 1 unidad de Patata
- Sal
- Eneldo
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1.
Pela los ajos, las chalotas, la cebolla morada, una de las zanahorias y la patata y pícalos en daditos. Reserva.
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2.
Limpia el puerro y la cebolleta y corta en trozos medianos. Pela el nabo y la otra zanahoria y trocéalos también.
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3.
Echa el agua en una olla, pon al fuego y cuando hierva, incorpora la parte blanca del puerro, el nabo, la cebolleta
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4.
Echa el agua en una olla, pon al fuego y cuando hierva, incorpora el ajo, la parte blanca del puerro, el nabo, la cebolleta y la zanahoria.
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5.
Añade un poco de sal y deja que cueza durante unos 40 minutos a fuego suave.
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6.
Cuela el caldo y prueba de sal.
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7.
Vuelve a poner el caldo al fuego y añade la cebolla morada, la chalota, la parte verde del puerro, la patata y la zanahoria que habíamos reservado.
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8.
Deja que cueza y espera hasta que los vegetales estén hechos pero sin pasarse.
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9.
Añade el eneldo fresco y ya tienes lista la sopa para servirla en cuencos o en platos hondos.
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10.
¡No dejes que se enfríe!
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