Pocas combinaciones hay mejores que esta si eres goloso, te gustan las tartas y adoras el chocolate. Ponemos como base un bizcocho fino -que puedes comprar o tener ya hecho en versión casera- y le ponemos por encima una esponjosa y aireada mousse de chocolate. Decoramos nuestra tarta con grageas de chocolate de varios colores.
- 1 plancha de Bizcocho fino
- 500 ml de Nata para montar
- 100 g de Azúcar glas
- 4 ud de Hojas de gelatina
- 3 ud de Huevo
- 250 g de Chocolate para postres
- 1 chorrito de Leche
- Mantequilla
- Sal
- Grageas de chocolate
- Menta
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1.
Engrasa un molde de tarta redondo con mantequilla y coloca encima el bizcocho recortando los bordes para que solo cubra la base.
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2.
Hidrata las láminas de gelatina neutra en abundante agua fría.
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3.
Funde el chocolate troceado con un poco de leche en el microondas o al baño maría, añade las gelatinas y deja enfriar ligeramente.
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4.
Separa las claras y las yemas de los huevos y échalos en cuencos diferentes.
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5.
Monta las claras a punto de nieve con una pizca de sal, por un lado.
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6.
Bate las yemas con el azúcar glas, por otro, y mezcla el resultado con la mezcla de chocolate.
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7.
En otro cuenco, montamos la nata bien fría.
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8.
Junta las 3 mezclas -claras, yemas y nata- con movimientos envolventes para hacer la mousse de chocolate.
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9.
Echa la mousse sobre la base de bizcocho del molde.
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10.
Mete en la nevera durante unas 4-5 horas.
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11.
Saca la tarta, desmolda con cuidado y decora con las grageas de distintos chocolates y hojas de menta.
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