La calabaza, por su dulce sabor, es siempre una guarnición deliciosa y muy apetecible que, en esta ocasión, presentamos en formato de ensalada templada. Además, puedes añadirle frutos secos, como unas nueces, y un poco de rúcula para convertirla en un saludable primer plato.
- 500 g de Calabaza
- 200 g de Queso feta
- 1 cucharada de Comino molido
- 3 cs de Aceite de oliva
- 1 cucharada de Vinagre de Jerez
- Sal
- Pimienta negra
- Perejil fresco
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1.
Precalentamos el horno a 200 ºC.
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2.
Quitamos las pipas de nuestra calabaza, la cortamos en dados, y la enjuagamos un poco.
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3.
Colocamos la calabaza en una bandeja de horno, aderezamos con aceite de oliva, sal y comino en polvo y horneamos durante unos 20 minutos.
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4.
Retiramos del horno, dejamos que temple y, por último, aliñamos con el vinagre, el perejil fresco, la sal y la pimienta.
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5.
Troceamos el queso feta, desmigándolo con los dedos, y lo espolvoreamos. Servimos templada.
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