El mejillón es un producto que tiene mucho sabor, es barato y muy nutritivo. Por eso, no dudes en convertirlo en un aliado de tu cocina e incorpóralo a numerosas recetas. Su versatilidad es tal que nos permite no aburrirnos y hacerlos de mil maneras distintas. Esta vez, los vamos a cocinar al vino blanco, con tomate frito y un toque picante de cayena.
Ingredientes
- 800 gramos de mejillones
- 1 unidades de cebolla pequeña
- 1 unidades de dientes de ajo
- 2 unidades de pimienta cayenas
- 1 cucharadas de tomate frito o concentrado de tomate
- vino blanco
- agua
- sal
- aceite de oliva
- hierbas aromáticas
Preparación
- Lava y limpia los mejillones. Reserva.
- Lava y pica (por separado) la cebolla y el ajo en juliana.
- Rehoga la cebolla en una cucharada sopera de aceite en el fondo de una cacerola y cuando esté tierna, añade el ajo troceado y las cayenas, sube el fuego y dora unos minutos con cuidado de que no se queme.
- Añade el tomate y un puñadito de sal, remueve y vuelca los mejillones en la cazuela junto con el vino blanco y el agua.
- Tapa y cocina al vapor hasta que se abran.
- Sirve y decora con alguna hierba aromática.
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