“Nunca se supera”. Con estas dolorosas palabras recordaba Lisa Marie Presley hace solo unos meses, en septiembre de 2022, la trágica muerte de su hijo Benjamin en 2020 con 27 años. La hija de Elvis Presley ha muerto a los 54 años víctima de un ataque al corazón dejando una nueva y dolorosa despedida prematura en el seno de la familia. Perder a un hijo, quizá uno de los dolores más intensos que puede padecer una madre, fue una herida que marcó a la hija del artista, como ella misma afirmó en una carta en la que explicaba que lo ocurrido cambió para siempre su vida. Benjamin Keough fue encontrado en la casa de la familia tras acabar con su vida después de haber consumido diversas sustancias y tras una discusión con su pareja. “He estado viviendo en una realidad horrible y que no me suelta desde la muerte de mi hijo hace dos años" aseguraba Lisa Marie.
Lisa Marie Presley y su última aparición pública en los Globos de Oro dos días antes de su muerte
“No es un tema fácil para nadie, el menos popular para mantener una conversación. Es largo, potencialmente dañino y muy difícil de enfrentar, pero si queremos avanzar el dolor tiene que poder expresarse” aseguraba señalando que esta pena la iba a llevar siempre en el corazón. “Es algo que tienes que llevar contigo el resto de tu vida, a pesar de lo que la gente o la cultura nos quiera hacer pensar. No lo superas, no pasas página". Decía además que se había sentido sola durante el proceso pues, aunque muchas personas habían estado a su lado al principio, con el paso del tiempo se había dado cuenta de que muchos de sus familiares pretendían que siguiera adelante. “Así que si conoces a alguien que ha perdido a un ser querido, da igual cuánto tiempo haya pasado, llámales, visítales, apreciarán más de lo que te imagines que te preocupes", decía.
Benjamin, el hijo de Lisa Marie Presley, descansa en Graceland junto a Elvis Presley
En estas palabras, admitía la hija de Priscilla que se sentía culpable por lo ocurrido, que se preguntaba las razones y se obsesionaba. Su hijo Benjamin lidiaba también con diversas adicciones, como ella misma (lo confesó en 2019) y había estado en rehabilitación hasta en tres ocasiones, la última de ellas solo seis meses antes de su muerte. Por desgracia nunca había finalizado el tratamiento. “Perder a un hijo es realmente tu peor pesadilla", admitía Lisa Marie Presley, que explicaba que encontrar apoyo en otras personas que habían pasado por una experiencia similar, aunque no acababa con el dolor, sí ayudaba a mitigarlo.
Sus tres hijas, explicaba, también estaban atravesando el mismo proceso de duelo que ella y era precisamente el pensar en las tres como lograba seguir adelante. Ahora Riley Keough, de treinta y tres años, y las mellizas Finley y Harper, de trece, atraviesan otro complicadísimo momento tras la muerte de su madre, que sin duda ha sido repentina e inesperada. Una terrible noticia que ha conmocionado a Hollywood y ha dejado destrozada a la familia.
