María Patiño ha vuelto a Sálvame tras su boda sorpresa con Ricardo Rodríguez, celebrada el pasado 15 de agosto en Sri Lanka. Sin contener la emoción, la periodista ha revelado numerosos detalles del enlace. "Era un sueño, no solo mío, y lo pude hacer realidad", dijo. Según explicó, la celebración fue surgiendo "sobre la marcha" cuando supo que iba a tener dos semanas seguidas de vacaciones. "Esto era algo que yo había soñado, pero que nunca me imagine que iba a ocurrir este verano", declaró. "No estaba previsto que fuera a ser el 15 de agosto, ni siquiera teníamos claro al principio que fuera a ser en Sri Lanka. Me iba a ir a Bali de vacaciones, pero había muchos temblores y me dio miedo, y a última hora decidí que quería irme a Maldivas. Me lleve el vestido a Maldivas, pero cuando llegué me di cuenta que aquello no era para mí", reveló. Sin embargo, "cuando llego a Sri Lanka dije: 'Este sí es el sitio'. Por la energía, por lo que vi... pero no había manera de poner una fecha porque ahora es temporada baja allí y hay muchísimas lluvias", añadió.
El responsable del hotel, que curiosamente era gallego como María, le dijo que no se preocupara por nada y la periodista se dejó llevar. "Yo dije que me gustaría que fuera el día 15 porque es mi cumple, pero no sabíamos si podía ser por el tema del clima. Lo que tenía claro es que quería que fuera casi al final del viaje, pero ni preparé nada, ni organice nada, simplemente me dijeron a las cinco y media baja a la playa y cuando bajé de la habitación me pusieron la canción de No dejes de soñar y a partir de ahí todo empezó", recordó. "Me he casado en inglés, la ceremonia era en inglés, pero lo transcribieron para yo tomar conciencia, y no fue en ritual maya… y la alianza es muy normal", detalló.
La pareja se dio el 'sí, quiero' en la intimidad más absoluta. "No había nadie, ni amigos, ni familia", aseguró María. Su familia si sabía que se iba a casar y varios compañeros del programa también, como Mila Ximénez, Belén Esteban y Gema López. Ahora, la periodista y el actor piensan en celebrar su boda con ellos en España. "Voy a compartir con mi gente algo más, sabemos lo que vamos a hacer, pero son cosas que se quedan para nosotros", señaló.
La presentadora de Socialité es consciente de que su boda en Sri Lanka no tiene validad en España y que podría haber hecho las cosas de otra manera. Podía haber hecho las cosas a nivel legal antes de esta boda, pero no tenía capacidad. Sabía lo que tenía que hacer, conocía los trámites, podía haberlo hecho, pero no tenía capacidad, no era un tema de ocultar, es que estaba agotada. Yo necesitaba dormir y descansar y después meterme en esta aventura", confesó.
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Los detalles de su vestido de novia
María confió en Ion Fiz para su boda. "Me sorprendió que me llamara, fue el 24 de julio, miércoles. Me estaba echando la siesta y me dice: 'Que me caso y me gustaría encargarte el vestido pagado, 2.500 euros tengo de presupuesto'. Y me desmayé, me di una ducha, y me puse a dibujar para ver en dos días a María… Se me ocurrió que fuese corto, con falda encima", comentó el diseñador.
La periodista reconoció que lo que más le preocupaba era "el maquillaje y la peluquería" por la humedad del lugar. "Le dije a Ricardo que a las cinco se fuera de la habitación para estar sola. Me puse una mascarilla y aquello se caía, los chorretes del maquillaje.... dije como estoy morena a cara lavada, rímel y brillo. Me alisé el pelo y abro la ventana, solo quería respirar, y hace el pelo... digo déjate que fluya... cuando bajé de la habitación y me vio me dijo: 'Qué guapa estás'", relató.
