Cada vez son más las mujeres que, por unas u otras razones, deciden esperar e iniciar la búsqueda de su primer embarazo a una edad más tardía que antes. De hecho, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), la edad media actual para tener hijos en España es de 33 años. Una cifra que se ha alcanzado este año por primera vez. Y es que desde 2011 hasta el año 2020, la edad de maternidad ha ido en aumento a razón de una décima cada año, mientras que a partir de 2020, la tasa ha aumentado en tres décimas. Aunque, la realidad es que en el año 2021 las mujeres de 34 años fueron las que más hijos tuvieron, unos 25.000 bebés. En la década de los años 70, sin embargo, la cifra estaba muy por debajo: los 26 años.

Si tenemos en cuenta esta tendencia y cruzamos los datos con la evidencia científica que nos dice que, a partir de los 35 años, la búsqueda de un embarazo es más complicada, no es de extrañar que los tratamientos de fertilidad desde 2015, como afirmaba el propio Ministerio de Sanidad, fuesen en aumento cada año. Una cifra mantenida hasta el año 2020, desde el que se ha producido un descenso de su demanda debido a la pandemia (lo que ha supuesto un descenso importante de la natalidad en nuestro país), pero que, aseguran las clínicas de fertilidad, comienza a recuperarse. Y las mujeres, que han retrasado su deseo de ser madres, acuden a consulta buscando el mejor tratamiento que se les pueda ofrecer, el más seguro y el que más tasas de éxito tenga. Por eso, los profesionales de reproducción asistida estudian nuevas vías y técnicas. El último del que hemos oído hablar últimamente es el rejuvenecimiento ovárico. ¿En qué consiste?¿Es válido para todas?¿Es seguro? Esas son las preguntas que se nos plantean.

¿Qué es el rejuvenecimiento ovárico?

El Dr. Joaquín Llácer, director médico de Ginefiv, nos explica que el rejuvenecimiento ovárico es “una forma de medicina regenerativa encaminada a activar la función ovárica en situaciones en las que el ovario ha dejado de funcionar, como puede ser la menopausia, o su respuesta a los tratamientos de fertilidad es baja o inexistente (es decir, cuando hablamos de que existe baja respuesta a ellos)”.

Así, en la actualidad, existen diversas técnicas que nos permiten este rejuvenecimiento ovárico:

• La fragmentación ovárica.
• La inyección o movilización de células madre.
• La inyección de plasma rico en plaquetas, que es la más utilizada.

Por tanto, “estaría especialmente indicada en aquellas mujeres en las que la respuesta ovárica es extremadamente baja o inexistente y la paciente no acepta como alternativa la donación de ovocitos”, nos explica el doctor.

Dentro de las técnicas, podríamos hablar de dos grandes grupos:

1. El primero, recoge aquellas técnicas que se basan en células madre y pensada para aquellas mujeres con menopausia o premenopausia, con su infusión en la arteria ovárica y encaminada a la formación de óvulos a partir de estas células madre.
2. La segunda, basada en la activación de los folículos latentes, más encaminada a aquellas mujeres con fallo ovárico precoz o baja reserva ovárica.

A día de hoy, podemos decir que esta técnica es conocida como una revolución dentro del mundo de la reproducción asistida, pero está lejos de ser una realidad completa. Las investigaciones sobre ella avanzan cada vez más, pero aún “deberíamos afirmar que estamos en una etapa bastante experimental”.

¿Encierra algún riesgo el rejuvenecimiento ovárico?

En primer lugar, nos dice el doctor, “la mujer que decida someterse a este tratamiento debe ser evaluada por un equipo médico especializado que se asegure de que la paciente ha entendido la evidencia existente”. De hecho, las técnicas de rejuvenecimiento ovárico, “aunque muy prometedoras, deben considerarse aún cuasi-experimentales”. Por ello, la primera condición para comenzar con esta técnica es que “la paciente reciba la información adecuada”.

Sin embargo, nos confirma el doctor, no es peligrosa. “Si bien es una técnica nueva, los datos sobre seguridad son muy tranquilizadores, porque, sobre todo, hay que tener en cuenta que el uso del plasma rico en plaquetas está muy generalizado en otras especialidades, sin problemas, como la traumatología”.

Un camino lento hacia el éxito

En la actualidad, como hemos visto, esta técnica de reproducción, aunque se utiliza en algunas mujeres, está en fase de investigación, con unos esfuerzos centrados “no solo en activar la función ovárica, sino también en mejorar la calidad de los óvulos, sobre todo, en mujeres de edad avanzada”. De esta forma, nos explica, “podremos centrar la innovación en los próximos años en este campo, pudiendo asistir a una nueva revolución en los tratamientos de fertilidad que mejore el pronóstico de las mujeres en edad avanzada”.