Carolina y Carlota: el estilo monegasco de madre e hija vuelve a triunfar en Montecarlo

El blanco y el negro como protagonistas de dos looks sobrios y elegantes

Por María Martín de Aguilar

Durante este fin de semana, los amantes del mundo de la hípica han tenido una cita en Montecarlo con motivo del Concurso Internacional de Salto, un exclusivo evento que no se han querido perder algunos miembros de la familia real monegasca. Si el viernes pudimos ver cómo el príncipe Alberto de Mónaco y su sobrina y presidenta de honor de la competición, Carlota Casiraghi, acudían al evento juntos para presenciar algunos de los saltos, en esta ocasión la nieta de Grace Kelly ha vuelto a dejarse ver -esta vez para la entrega de premios- junto a su madre, la princesa Carolina de Mónaco y, para sorpresa de todos, junto a su hijo mayor de 7 años Raphäel Elmaleh.

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Derroche de estilo entre madre e hija

Si en la primera jornada de la competición pudimos ver cómo Carlota Casiraghi acudió al evento junto a su tío con un dos piezas de Chanel blanco en tweed con sandalias de cuña de la casa, en esta ocasión, la hija de Carolina se ha decantado para acudir al Concurso Internacional de Salto por un vestido muy representativo de La Maison, la icónica firma de alta costura francesa de la que es actual embajadora. Carlota, quién nos tiene acostumbrados a la versatilidad de sus looks, ha optado para este evento por un vestido midi de manga larga y de seda en colores blanco y negro con un estampado en mosaico con el logo de la firma de Chanel sobre ondas horizontales, de la pre-colección primavera/verano 2021. Lo acompaña de unas sandalias con tacón mini y pulsera de tobillo fina en color negro, y en cuanto al peinado, la nieta de Grace Kelly se ha decantado por llevar su bonita melena suelta y natural con raya en el medio, con ese estilo desenfadado pero muy chic que suele ser característico de la hija de la princesa.

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Por su parte Carolina de Mónaco, siempre con la clase y el estilo sobrio que la caracterizan, desfiló por la arena del hipódromo en Montecarlo con un conjunto fluido en color blanco roto con cinturón anudado a la cadera de la firma Halston, y acompañado de unas sandalias de tacón en tono plateado mezclado con transparencias. Un perfecto look favorecedor que te puede servir de inspiración para salir a cenar en las noches de verano. El estilismo lo remata con las joyas, como el collar, el brazalete y pendientes de oro con diamantes engastados, que le dan ese toque distinguido que al que estamos tan acostumbrados por parte de la princesa de Mónaco. 

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Sin embargo, la estrella del evento en el desfile de la familia monegasca ha sido el hijo de Carlota y nieto de Carolina, Raphäel Elmaleh, al que hace tiempo que no vemos ante los focos mediáticos, y quién acaparó todas las miradas con su tierna sonrisa. Raphäel estuvo en todo momento acompañado por su madre y su abuela quiénes no pararon de tener gestos cariñosos con el nieto de la Princesa de Mónaco. Para esta ocasión, el pequeño llevó un traje de chaqueta y pantalón de lino en color azul, una camisa de rayas blancas y azules y unas zapatillas deportivas.

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