¿Qué sabemos sobre la nueva variante Kraken de la COVID-19?

¿Es más contagiosa? ¿Cuáles son sus síntomas? Hablamos con una especialista en Epidemiología sobre la nueva oleada de contagios que se está viviendo en muchos rincones del planeta

Por Pilar Hernán

Cuando parece que la pandemia ya comenzaba a dar signos de agotamiento, volvemos a ponernos en estado de alerta debido a las últimas noticias que han saltado sobre una nueva variante de la COVID. La voz de alarma la ha dado la Organización Mundial de la Salud (OMS) que ha advertido de que la variante XBB.1.5, que ya se conoce como cepa Kraken, es la más contagiosa de todas las detectadas hasta la fecha y no ha dudado en expresar su preocupación por su rápida propagación, que puede significar el comienzo de una nueva oleada de contagios. "La XBB.1.5, recombinación de los sublinajes BA2, está aumentando en Europa y Estados Unidos, ha sido identificada en más de 25 países y la OMS la está siguiendo de cerca", indicó en la primera rueda de prensa del año de la organización su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus.

Aunque aún se está investigando y los datos son preliminares, lo cierto es que ya sabemos que se trata de una variante que se detectó por primera vez en Nueva York y Connecticut en otoño, en concreto el pasado mes de octubre. Tanto es así que dicha cepa comenzó a propagarse de manera muy rápida por todo el noreste de Estados Unidos y se estima que actualmente provoca más del 40% de todas las infecciones de COVID en el país y en torno al 70% en la región noreste, la más afectada. Esta situación ha hecho que hayan aumentado las hospitalizaciones entre la población más vulnerable, en concreto en personas mayores de 70 años.

Pero, como ha sucedido siempre en esta pandemia, lo cierto es que una vez que aparece, en un mundo global como el que vivimos, pronto comienza a traspasar fronteras y, además de Estados Unidos, la variante Kraken ha sido detectada en más de 30 países, entre ellos España, y otros países europeos, como Francia, Alemania, Holanda, Irlanda y el Reino Unido, así como en otros lugares como Australia, la India o Singapur. Todo parece indicar que la variante ya se encuentra en circulación en todo el planeta.

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Para saber más sobre esta variante hemos hablado con Patricia Guillem, catedrática de Epidemiología, Salud Pública y Medicina Preventiva de la Universidad Europea de Valencia.

¿Qué es la llamada variante Kraken?

La denominada variante Kraken es un sublinaje que deriva de la mutación de la primera subvariante de Omicron. El nombre impuesto a la actual cepa circulante de coronavirus proviene del legendario monstruo marino, un calamar gigante que acechaba a los barcos de marineros y piratas en el mar abierto. Científicamente se le conoce con el nombre de XBB 1.5. Su difusión avanza rápidamente en China y en Estados Unidos, aunque ya está presente en más de 30 países.

¿Deberíamos preocuparnos ante el aumento de casos de esta variante?

En principio no debemos preocuparnos porque es una realidad con la que tendremos que convivir no solo en este momento, si no también en el futuro, ya que es probable que continúen generándose nuevas variantes y subvariantes de esta enfermedad respiratoria que ha pasado a compartir protagonismo a nivel de prevalencia con la gripe o incluso más.

¿Es una variante más virulenta, más grave?

No es una variante más grave, sino que se considera más contagiosa. Aunque, no debemos olvidar que cada organismo puede responder de una forma distinta ante la presencia de una enfermedad y que probablemente los cuadros más graves se producen con mayor frecuencia en personas más sensibles, grupos vulnerables y/o con patologías previas.

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Sí que destaca por su mayor capacidad de contagio, ¿no es así?

Exacto, como he respondido anteriormente tiene una mayor capacidad de difusión y, por lo tanto, de alcance poblacional. Se puede llegar a producir transmisión comunitaria. Pero la ventaja principal con la que contamos es que aunque no se evite la infección la pauta vacunal administrada en España ayuda muchísimo a reducir las complicaciones que tendría la enfermedad. En España hemos tenido una alta tasa de participación para recibir la vacuna y sus correspondientes dosis de recuerdo, esto supone la principal herramienta de control para la enfermedad.

¿Difieren sus síntomas de los que conocemos de las variantes previas?

Los síntomas que ocasiona no difieren de los producidos por otras variantes previas de COVID y/o del virus de la gripe. Entre los síntomas principales, podemos destacar: fiebre ocasional, dolores musculares y/o articulares, dolor de garganta, presencia de tos y cansancio o agotamiento físico.

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¿Puede escapar, por los datos que tenemos hasta el momento, a la inmunidad que otorgan las vacunas o el hecho de haber padecido la enfermedad?

A esta nueva variante se le considera inmunoevasiva, lo que significa que gracias a su mutación le confiere la habilidad para evadir nuestras propias defensas, es decir, escapa de los anticuerpos generados por las vacunas administradas y/o por haber padecido la enfermedad con anterioridad. De esta forma consigue infectar a células y producir su cuadro clínico.

¿Qué medidas se deberían tomar ante la irrupción de esta nueva variante, al parecer, más contagiosa?

  • Como medidas preventivas se recomienda un comportamiento cívico responsable, haciendo uso de la mascarilla higiénica o FPP2 en aquellos ambientes en los que sea difícil evitar el contacto físico y haya aglomeraciones, en espacios poco ventilados, así como en el transporte público y cuando acudimos a centros sanitarios.
  • No olvidemos tampoco la higiene frecuente de manos y evitar tocarnos la cara sin haber realizado previamente esta higiene.
  • Debemos a su vez cumplir con la pauta de vacunación recomendada por la autoridad sanitaria y las dosis de refuerzo establecidas para cada grupo poblacional en función de sus necesidades.
  • Actualmente, también están disponibles en las farmacias test rápidos detección que permiten un autodiagnóstico que nos permite conocer nuestra situación y aplicar las medidas necesarias.
  • En los aeropuertos se han instaurado de nuevo mayores controles para pasajeros procedentes de áreas más afectadas, obligando a acreditar el estado de vacunación (solo vacunas reconocidas por la OMS) y la presentación de una prueba diagnóstica (PCR) negativa.