No son pocas las personas que tienen en alguna ocasión un herpes en sus labios. Una dolencia que, además, suele repetirse con cierta frecuencia.  "En realidad, el herpes labial se produce por una infección viral, provoca por el virus Herpes simple. El problema es que una vez que tienes contacto con este virus, permanece inactivo en las células nerviosas, y por eso reaparece en diferentes momentos. Esto explica por qué hay personas que suelen sufrir calenturas de vez en cuando y otras, en cambio, que nunca las han sufrido", nos cuenta Rocío Escalante, titular de Arbosana Farmacia.

Apunta sus síntomas

La experta cuenta que suele haber tres fases bien diferenciadas:

- Todo suele empezar con una sensación de hormigueo, escozor y ardor en el labio.

- Después, la zona se inflama y aparece la ampolla o ampollas que pueden supurar.

- Por último, esa ampolla se acaba convirtiendo en una costra.

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¿Qué factores pueden hacer que aparezca?

Como detallábamos antes, el origen es un virus, con el que solemos tener contacto en la infancia. Partiendo de esta base, hay que tener en cuenta que, tal y como nos explica la farmacéutica, hay diversas situaciones que pueden reactivar el virus. Algunos ejemplos son una bajada de defensas, el estrés, o padecer un resfriado o una gripe. Además, otro factor que también puede provocar su reactivación es la exposición prolongada al sol, sin utilizar protección labial, tanto en verano, como en invierno, por ejemplo, si vamos a esquiar.

¿Se puede prevenir su aparición?

Una de las dudas más habituales que nos pueden surgir es si se puede evitar su aparición, teniendo en cuenta que es una lesión molesta en una zona muy visible del rostro. "Si eres propenso a sufrir herpes labial, recomendamos usar siempre bálsamos labiales hidratantes, proteger los labios del sol, y en caso de resfriado, gripe o en épocas de estrés, tratar de descansar bien, para mantener las defensas altas", apunta Rocío Escalante.

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Así debes tratarlo

La farmacéutica nos explica que, una vez que sale el herpes, este no se puede eliminar, es decir, hay que tener paciencia y lo único que podemos hacer es tratar de minimizar las molestias. Suele durar una semana, con las diferentes fases que hemos comentado más arriba. En el caso de que durara más tiempo o hubiera algún signo de infección, entonces sí que convendría acudir al médico para que valorara la necesidad de un posible tratamiento con antibiótico. Y tenemos que tener en cuenta que en la farmacia disponemos de diferentes tratamientos tópicos que nos ayudan a minimizar los síntomas más molestos, como son el picor, la quemazón o la inflamación.

Pero no solo eso, además, es importante mantener una buena higiene en la zona, intentar no tocarlo con las manos sucias y, por supuesto, evitar besar, compartir vasos, cubiertos… con otras personas porque no podemos olvidarnos de que estamos ante un virus contagioso. La farmacéutica nos da, además, un truco: si no quieres prescindir del pintalabios, puedes usar parches transparentes que protegen el herpes y que permiten usar maquillaje encima. Pero ten en cuenta que no se recomienda el contacto directo del cosmético con el herpes.

Herpes en tiempos de mascarilla

Estamos, además, en un momento en el que, debido a la crisis sanitaria de la covid-19, nos vemos obligados a llevar mascarilla de forma habitual, que puede ser mala aliada de nuestro herpes. ¿La razón? La humedad que se produce dentro de la mascarilla puede retrasar su curación. Por este motivo, conviene quitarla, siempre que sea posible, porque se mantenga la distancia social, y es importante, además, cambiar la mascarilla si está húmeda y, en general, de forma más habitual.

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