Estas son las claves de los organizadores profesionales para lograr una casa en orden, ¡cópialas!

La teoría es fácil de aprender. Todos conocemos la importancia que tiene el orden en una casa, y en una vida en general. Es fundamental si queremos que nuestro hogar sea agradable, cálido y confortable.

Sin embargo, poner esto en práctica es mucho más costoso. De hecho, son muchas las personas que no logran interiorizar una rutina de orden para su casa. A continuación vamos al centro de la cuestión y nos fijamos en las rutinas y planteamientos de los expertos. Descubre qué cosas hacen los organizadores profesionales para vivir en una casa en orden.

Saben analizar la situación

Cuando no encuentras nada de lo que buscas por tu casa, el contenido de los cajones impide cerrarlos suavemente y te topas a cada paso con algo fuera de su sitio… tienes un problema de orden. Reconocerlo será el primer paso para poder resolverlo definitivamente.

Los organizadores profesionales saben analizar cada situación de caos doméstico para buscar la solución más adecuada. Tendrás que revisar a fondo cuáles son los hábitos que te llevan hacia el desorden. Pregúntate por qué tu casa no es ese espacio agradable con el que sueñas y cómo puedes lograrlo. Antes de tratar de cambiar las cosas es importante detectar dónde está el fallo.

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Apuestan por la serenidad y la alegría en el hogar

Los organizadores profesionales tienen muy claro cuál es el objetivo a perseguir: conseguir un hogar confortable y cálido, sereno, que nos haga felices. Por eso, lo primero que debes preguntarte es qué quieres conseguir en tu casa. ¿Quieres que se convierta en este espacio elegante y bello, sin una mota de polvo? ¿O prefieres que sea un hogar sereno y tranquilo donde te sientas a gusto?

La mayoría de los organizadores profesionales coinciden en que una casa organizada es aquella que está en armonía con los valores y las necesidades de sus dueños, y que es capaz de transmitirles serenidad, paz y alegría.

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Entienden que no hay una única forma de conseguir una casa organizada

Cada persona es diferente y su casa también lo es. Por eso, no todo el mundo necesita las mismas rutinas de orden y organización. De hecho, existen muchas y muy diferentes formas de conseguir el objetivo: una casa en orden.

Puede que haya rutinas que sirvan mucho a algunas personas y que sean totalmente inútiles para otras. La clave está en realizar los cambios positivos en tu casa y en tu vida, aprovechando las técnicas y siguiendo el camino que a ti te sirva realmente.

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Se deshacen de lo superfluo

Una premisa esencial para cualquier organizador profesional es la de no acumular. Por eso ellos solo tienen en sus casas objetos que aman y que les resultan útiles, y se cuidan mucho de llenar el espacio (tan valioso como es) con cosas accesorias que aportan poco o nada.

Piensa en todas las cosas que tienes en casa, piensa en el lugar que les asignado para guardarlas, y elimina el resto. Este gesto supondrá un gran ahorro de tiempo y esfuerzo para ti.

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Compran de forma consciente

Si nos dedicamos a comprar sin criterio, a lo loco, lo más probable es que nuestra casa y nuestro armario estén repletos de cosas, muchas veces accesorias, que van a contribuir a aumentar el desorden y el caos doméstico.

Los organizadores profesionales son muy conscientes de lo que compran. Antes de pagar se detienen a pensar si lo que están comprando les va a resultar útil o les hace felices, y asumen que tendrán la responsabilidad de cuidarlo, limpiarlo, ordenarlo y desecharlo cuando llegue el momento. Solo lo comprarán si creen que todo eso merece la pena. Es una forma eficaz de controlar el volumen las de compras.

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Planifican con acierto las tareas

De nada sirve sentarse a planificar tus tareas del día si no lo haces de forma razonable y realista. Si escribes una lista infinita de tareas por hacer, inabarcable para una sola jornada de trabajo doméstico, solo conseguirás frustrarte y desanimarte, al ver que no eres capaz de lograr tu objetivo. Es fundamental ser realista con las metas que te pones, fijando objetivos asumibles que puedas cumplir. Así te animarás a seguir trabajando.

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No procrastinan

Para evitar caer en la procrastinación, un mal tan extendido hoy, los expertos siguen un consejo bastante fácil de aplicar: dividen las tareas en subtareas más pequeñas y fáciles de hacer y de terminar. De esta forma, es posible vencer la apatía y ponerse manos a la obra.

Si ordenar tu armario te parece una tarea descomunal, en lugar de posponerlo, comienza por revisar y ordenar el cajón de la ropa interior. Esto te animará a seguir en otro momento y, al menos, habrás pasado a la acción. Los cambios pequeños nos ayudan a generar confianza en nosotros mismos y nos impulsan para seguir trabajando.

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Mantienen ciertas rutinas cotidianas

Si no estableces algunas rutinas de orden, será imposible que tu casa esté organizada más de 10 minutos seguidos. Por eso los organizadores profesionales han adquirido ciertos hábitos o rutinas. Estas son algunas de ellas:

- Nada más entrar por la puerta de casa guardan en su sitio todo lo que traigan: los zapatos, el abrigo, el bolso, el paraguas, etc.

- Al llegar con la compra se deshacen rápidamente de los embalajes de plástico y cartón, llevándolos al punto de reciclaje. Utiliza frascos de cristal o envases de plástico en la despensa.

- Antes d irse a dormir dedican cinco minutos a ordenar un poco el salón: recoger las mesas, reubicar objetos y colocar los cojines del sofá.

- Recoger la cocina después de la cena es clave. Al día siguiente la cocina está limpia y recogida y tu día comienza con otro ánimo.

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Agrupan las cosas en distintas zonas

Este es un truco muy práctico que recomiendan muchos organizadores profesionales. Se trata de centralizar todo lo necesario para una tarea o un uso concreto en una zona determinada de la casa. Como, por ejemplo, crear una zona de café o de desayuno en la cocina, con un mueble desayunador; una estación de lavado y planchado; o una zona de trabajo delimitada. Lo importante es que lo hagas a tu manera para que te resulte práctico y útil.

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