El poder del microcemento
Apto para cualquier espacio, también para el baño, el microcemento se dibuja como una alternativa genial para revestir las superficies: desde el pavimento a las paredes, pasando por encimeras e, incluso, el lavabo.
Este material compuesto por minerales, pigmentos y polímeros, se puede instalar sobre cualquier soporte y solo tiene 2 o 3 mm de grosor, lo que lo convierte en una solución perfecta para revestir paredes y suelos, pero también encimeras y lavabos, ya que es impermeable. Se trata de un revestimiento continuo, sin juntas, que puede teñirse de muchos colores y tiene un efecto muy decorativo.
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