Somos muy 'potato lovers'. Este tubérculo está en la lista de los ingredientes más básicos de las dietas de numerosos lugares. ¡Hay tantas variedades y nos permiten hacer tantos miles de recetas que caemos rendidos ante la patata! Aquí, te proponemos cocerlas para servirlas en una ensalada con cebolleta, guisantes, rábanos y una mayonesa de ajo y mostaza.
- 400 g de Patata
- 200 g de Guisantes
- 1 unidad de Cebolleta
- 3 ud de Rábano
- Sal
- Albahaca
Para la salsa
- 570 ml de Aceite de oliva
- 1 unidad de Yema de huevo
- 1 cucharadita de Mostaza de Dijon
- 1 diente de Ajo
- Zumo de limón
- Sal
- Pimienta
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1.
Pelar las patatas y cortarlas en dados grandes. Colocar en una olla con agua con sal y llevarla al fuego, dejándolas cocer unos 15 minutos (dependiendo del tamaño de los trozos) contados desde que el agua empezó a hervir.
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2.
Mientras, coger una cazuela pequeña con agua, añadir una pizca de sal y poner a cocer. Cuando empiece a hervir, agregar los guisantes y dejar cocer a fuego medio aproximadamente 6-8 minutos.
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3.
Picar la cebolleta y laminar los rábanos
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4.
Para la salsa, machacar el diente de ajo con un mortero hasta que esté totalmente triturado y añadir sal.
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5.
Mezclar la yema de huevo y la mostaza en un recipiente hasta que estén bien integrados. Añadir el aceite poco a poco en un hilo constante. Cuanto más aceite añadas, más líquida quedará la salsa.
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6.
Cuando la mezcla esté espesando, añadir el jugo de limón, el ajo machacado y la pimienta negra molida.
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7.
Colocar las patatas, los guisantes, los rábanos y la cebolleta en una fuente. Mezclar con la salsa y decorar con albahaca cortada en finas láminas. Meter en la nevera y si vas a transportarla, introduce en una fiambrera y llévala en una nevera portátil.
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