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clock 50min | easyFácil | 8 PORCIONES

Tarta de chocolate blanco y té matcha

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Por JON CAKE

Mostramos aquí una de las más de 30 recetas incluidas en el libro 'JonCake, las tartas de queso más gourmet'. Su autor, Jon García (más conocido como Jon Cake), dirige en Barcelona un establecimiento donde no es raro encontrar colas de golosos, ávidos por probar sus dulces. En este caso se trata de una tarta de chocolate blanco y té matcha, a la que aporta un toque muy especial la pimienta de timut (unas bayas de origen nepalí, de la misma familia que la pimienta de Sichuan).

El relleno
  • 500 g de Queso crema
  • 250 g de Chocolate blanco
  • 5 g de Té matcha
  • 300 g de Huevo
  • 150 g de Azúcar
  • 200 g de Nata 35% materia grasa
  • 50 g de Harina
  • 4 bayas de pimienta timut
La base
  • 200 g de Galletas María Dorada
  • 90 g de Mantequilla
  1. 1.

    Precalentamos el horno a 195 °C.


  2. 2.

    Calentamos la nata con las bayas de pimienta timut hasta que hierva. Tapamos con film y reservamos durante 30 minutos
LA BASE
  1. 1.

    Trituramos todos los ingredientes y disponemos sobre la base de un molde de 22 cm, cubierta con papel sulfurizado, pero dejando libres los bordes


  2. 2.

    Untamos los bordes con mantequilla y presionamos bien las galletas contra la base del molde y congelamos un mínimo de 10 minutos.
EL RELLENO
  1. 1.

    Volvemos a calentar la nata y vertemos sobre el chocolate blanco a través de un colador, para poder retirar las bayas de pimienta.


  2. 2.

    Emulsionamos bien con ayuda de una batidora y añadimos el té matcha, y seguimos mezclando para evitar que queden grumos.

  3. 3.

    Añadimos el resto de ingredientes y batimos hasta que la mezcla quede totalmente homogénea.
HORNEADO
  1. 1.

    Vertemos la mezcla sobre el molde y horneamos durante 25-27 minutos. Reservamos en un lugar frío durante 2 o 3 horas y servimos.
CONSEJO
  1. 1.

    Se puede añadir un toque más especial espolvoreando té matcha por encima de la tarta, una vez fría, pero entonces recomendaría eliminar cierta cantidad del relleno para que el sabor no se coma el resto.