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10min
Fácil
Arándanos, grosellas, moras, frambuesas... los frutos rojos nos ofrecen un mundo de posibilidades -y de colorido- en la cocina. Contribuyen a evitar la oxidación de nuestras células y pueden prevenir ciertas enfermedades. Su color se debe a la presencia de unos pigmentos conocidos como antocianinas, responsables de sus tonos rojo, púrpura o azul y de su capacidad antioxidante. Así que ¡aprovecha todas sus cualidades en forma de este refrescante 'smoothie'!
- 200 g de Frutos rojos congelados
- 200 ml de Leche o bebida vegetal
- 120 g de Yogur griego
- 20 g de Rúcula
- Jengibre fresco al gusto
- Edulcorante al gusto
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1.
Reserva unos cuantos frutos rojos para decorar.
-
2.
Tritura todos los ingredientes menos la rúcula hasta conseguir una mezcla cremosa y homogénea.
-
3.
Sirve en unos vasos o jarras y decora con los frutos rojos reservados y unas hojitas de rúcula.
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