La variedad de ingredientes que aceptan las ensaladas es prácticamente infinita. Las frutas, por ejemplo, son un producto a tener en cuenta, ya que su toque dulce ofrece un interesante contrapunto de sabor. En este caso vamos a hacer una ensalada de rúcula y pera, a la que vamos a sumar también un original toque crujiente gracias a las palomitas que añadiremos al final.
- 100 g de Granos de maíz para palomitas
- Aceite de oliva
- Sal
- 100 g de Rúcula
- 2 Peras grandes Conferencia
- 1 Granada
- 60 g de Jamón serrano en lonchas finas.
- Aceite de oliva virgen extra
LAS PALOMITAS
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1.
Calentar 2 cucharadas de aceite en una sartén a fuego vivo.
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2.
Cuando esté bien caliente, distribuir en el fondo los granos de maíz sin amontonarlos, cubrir con una tapa y bajar a fuego medio cuando comiencen a explotar.
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3.
Cuando ya no escuchemos ninguna palomita nueva explotar retirar la sartén del fuego, pasar a un cuenco las palomitas y sazonarlas con un poco de sal. Reservar.
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1.
Lavar bien las peras, secar. Cortar en dos mitades de forma vertical. Retirar las pipas centrales. Cortar las dos mitades en rodajas rodajas finas.
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2.
Desgranar la granada.
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3.
Cortar en cachitos las lonchas de jamón serrano.
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4.
Disponer en una fuente una cama de hojas de rúcula. Encima, disponer las rodajas de pera, de forma superpuesta, tal y como se muestra en la imagen.
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5.
Sumar los granos de granada y los cachitos de jamón.
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6.
Aliñar al gusto con sal y aceite de oliva virgen extra.
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7.
Terminar con un buen puñado de las palomitas preparadas previamente.
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