La pasta filo es una masa empleada en la gastronomía de Oriente Medio, el Magreb, Turquía, Armenia y los Balcanes. Son hojas muy delgadas, casi translúcidas que, después de horneadas, resultan súper crujientes. Hacemos una lasaña con ellas, rellena de fresas, jamón serrano y reducción de vinagre balsámico.
- 16 láminas de Pasta filo cuadradas
- 200 g de Fresas
- 200 g de Jamón serrano en lonchas
- Reducción de vinagre balsámico
- Mantequilla
- Hojas verdes para decorar
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1.
Precalienta el horno a 170 grados.
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2.
Derrite en el micro un poco de mantequilla.
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3.
Coloca la pasta filo en una bandeja y píntala con la mantequilla derretida con ayuda de un pincel.
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4.
Hornea la pasta filo, con calor por arriba y abajo, durante unos 7 minutos o hasta que veas que se doran.
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5.
Saca y deja enfriar.
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6.
Lava, seca y trocea las fresas en láminas.
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7.
Monta capas con la pasta filo, las fresas y la reducción de vinagre balsámico.
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8.
Decora con alguna hoja verde, brote o hierba aromática.
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