Es una de las cremas frías por excelencia, aunque su procedencia es francesa, esta sopa de verano hecha a base de patata y puerros es conocida mundialmente por su buenísimo sabor, frescor y suavidad. Como dato muy importante, es utilizar la parte blanca de los puerros y eliminar la parte amarilla y verde de éstos ya que la crema debe ser lo más blanca posible.
- 500 g de Puerros
- 400 g de Patatas
- 1 litro de Caldo de pollo o verduras
- 250 ml de Nata líquida
- Mantequilla
- Brotes tiernos
- Croûtons o picatostes
- Sal
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1.
Pelar los puerros y eliminar la parte que no sea blanca. Lavarlos, secarlos y trocearlos.
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2.
En una olla derretir 2 cucharadas soperas de mantequilla y sofreír los puerros a fuego medio durante 10 minutos.
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3.
Pelar las patatas y cortarlas en cascos. enjuagar y secar.
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4.
Añadir las patatas a la olla y sofreír junto a los puerros durante 10 minutos más con un poco de sal.
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5.
Acto seguido añadir el litro de caldo y dejar hervir a fuego medio durante 15 minutos.
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6.
Dejar reposar media hora y batir durante 5 minutos a alta velocidad.
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7.
Atemperar, añadir la nata líquida y batir durante 1 minuto para mezclar bien.
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8.
Enfriar en la nevera durante dos horas como mínimo.
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1.
Servir muy fría con unos crutones en un recipiente aparte. Añadir algunas tiras de puerro salteado en mantequilla y brotes verdes.
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