Esta pasta tan solo necesita de dos ingredientes. agua y harina, siendo este último el más importante en su composición, pues para que la masa nos quede bien elástica, es preferible que busques semolina o harina de sémola de trigo. Nosotros hemos utilizado esta masa para una pasta rellena, pero puedes hacer unos espaguetis o 'tagliatelle' con ella.
- 400 g de Harina de sémola de trigo duro
- 200 g de Agua templada
- 1 cucharadita de Sal (opcional)
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1.
En un bol bien grande, ponemos toda nuestra harina y vamos agregando, poco a poco, el agua templada. Mezclando con un tenedor.
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2.
Cuando la textura nos lo permita, empezamos a amasar con las manos, hasta acabar de añadir todo el agua y la pizca de sal si lo deseamos.
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3.
Al obtener una masa de textura homogénea, enharinamos una superficie amplia y lisa y comenzamos a trabajarla con las manos sobre ella. Estirando y doblando.
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4.
Hacemos una bola con la masa, la cubrimos con 'film' transparente y la dejamos reposar entre 20 y 30 minutos.
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5.
Transcurrido este tiempo, vamos cogiendo pequeñas porciones de masa y alisando, con ayuda de un rodillo grande, hasta obtener láminas de un grosor aproximado de 2-3 mm.
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6.
Como, en este caso, queremos darle forma de pasta rellena, utilizamos nuestros moldes y cortapastas para ir dando la figura deseada a nuestra pasta. Si no tenemos estas herramientas, nos vale con un vaso, con lo que nos saldrán círculos.
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7.
Ponemos sobre una 'tapa' nuestro relleno, siempre frío y bien escurrido, y cerramos con otra. Sellamos bien los bordes.
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